Fotos: Maayan Toaf, GPO
Durante una visita a la parte central de la Franja de Gaza este martes, el Primer Ministro Biniamin Netanyahu lanzó por primera vez una propuesta concreta a la población palestina en relación a los secuestrados llevados allí por la fuerza el 7 de octubre del año pasado. “Le digo a todo aquel que quiera salir de este embrollo: quien nos traiga a un secuestrado, tendrá un camino seguro, junto a su familia, para irse de aquí. También daremos a cambio una suma de 5 millones de dólares por cada secuestrado. Elijan, la opción está en vuestras manos. Pero el resultado será el mismo: nosotros recuperaremos a todos”.
Por otro lado advirtió que “todo aquel que tiene secuestrados en su poder y los dañe, pagará un alto precio por ello, lo perseguiremos y lo encontraremos”.
Netanyahu formuló sus declaraciones al reunirse con tropas del ejército en la zona conocida como “el corredor Netzarim” en la parte central de la Franja de Gaza, acompañado por el flamante Ministro de Defensa Israel Katz, el Comandante en Jefe del Estado Mayor de Tzahal (las Fuerzas de Defensa de Israel) Teniente General Herzi Halevi y el jefe del servicio de Seguridad Shin Bet Ronen Bar.
Al conversar con los soldados y oficiales y elogiar su trabajo, recalcó que con ese esfuerzo están logrando el objetivo: “Hamas no gobernará Gaza, ni aquí ni en ninguna parte de la franja”.
El Primer Ministro aseguró que “estamos eliminando sus capacidades militares de forma muy impresionante, vamos ahora hacia sus habilidades gubernamentales y aún no hemos terminado”. Su resumen fue tajante: “Hamas no estará en Gaza”.
Netanyahu agregó que “nos estamos esforzando aquí y en todos lados por ubicar a nuestros secuestrados y recuperarlos. No damos el brazo a torcer y lo continuaremos haciendo hasta que devolvamos a todos a casa, tanto a los que están con vida como a los muertos”.
De fondo hay una senda polémica en la opinión pública israelí. Gran parte de la población- una clara mayoría, según diversas encuestas- considera que se ha alcanzado suficientes logros militares como para poder permitirse terminar con la guerra a fin de llegar a un acuerdo en cuyo marco Israel recupere a todos los secuestrados. Esto, dando por hecho que hacer lo máximo para que regresen a casa, debe ser el principal objetivo del gobierno y el país.
Uno de los puntos más problemáticos en la discusión se refieren al papel jugado por el propio Netanyahu. Sus críticos , entre ellos parte de las familias de los secuestrados, sostienen que él bloqueó o demoró acuerdos agregando cada tanto condiciones nuevas, por considerar que la prolongación de la guerra le ayuda a preservar su coalición de gobierno.
El Primer Ministro niega rotundamente la acusación, recalca que es Hamas quien no quiso en ningún momento un acuerdo y recuerda que también altos funcionarios en la administración Biden lo reconocieron. “Que yo sepa, no son miembros del Likud”, dijo Netanyahu esta semana .
Cabe recordar que decenas de los 101 secuestrados que se hallan aún en manos de los terroristas en Gaza, están muertos, habiendo sido asesinados en cautiverio o el 7 de octubre mismo en Israel, llevándose Hamas sus cuerpos sin vida a Gaza. A lo largo del último año, fueron varias las ocasiones en las que el ejército logró recuperar cuerpos sin vida de secuestrados, la mayoría de los cuales se sabía con certeza que habían sido llevados vivos a la Franja.
El último caso fue el hallazgo el 31 de agosto de seis cuerpos de secuestrados en un túnel, asesinados uno o dos días antes de la llegada de las tropas a ellos.
Un serio problema en las declaraciones de Netanyahu este martes en Gaza respecto a los secuestrados, es que Hamas ya avisó tiempo atrás que siempre que tropas se acerquen a un sitio en el que sus hombres tienen cautivos, la orden es ejecutarlos. En el caso de los seis cuerpos hallados junto a un charco de sangre en un túnel a fin de agosto, eso es exactamente lo que sucedió.
No es de descartar-aunque es una especulación meramente- que Israel tenga información precisa sobre la ubicación al menos de parte de los secuestrados, pero que no lance operativos para rescatarlos ya que se trata de sitios en los que ineludiblemente los terroristas sentirían a las tropas acercándose, y los asesinarían.