Según un sondeo de opinión publicado este domingo por el canal 13 de televisión en Israel, el partido Likud y el Primer Ministro Biniamin Netanyahu se hallan en el punto más bajo en décadas en cuanto al apoyo de la ciudadanía, y si se llevaran a cabo ahora las elecciones, volvería claramente a la oposición, en caída estrepitosa.
La encuesta fue llevada a cabo por Camil Fuchs , Profesor Emérito de Estadística de la Universidad de Tel Aviv, de los expertos más consultados en temas de opinión pública.
Las discusiones dentro de Israel en los últimos meses parecían concentarse en la polémica sore el plan de reforma judicial del gobierno, pero en realidad van más allá de ello. Claro está que ese tema sigue siendo central en la división interna y en las críticas de las que es objeto el Primer Ministro Netanyahu también de parte de ciudadanos que lo votaron. Eso ya se reflejó en sondeos anteriores.
Pero a ello se agrega el gran deterioro en la situación de seguridad, el ver a Israel lidiando con ataques desde varios frentes, cuando en el poder está una coalición cuyo jefe y distintos miembros presentaban a sus antecesores como débiles y prácticamente rendidos ante el terrorismo, prometiendo una política clara y firme para lidiar con ello.
A juzgar por los resultados de la encuesta , la mayoría entiende que hay una diferencia importante entre las promesas y la realidad, a lo cual se agrega el hecho que varios de los temas pendientes en los que Netanyahu prometía concentrarse, no han avanzado en absoluto sino lo contrario, mientras casi todo el tiempo de la coalición estuvo dedicado en los últimos tres meses a la polémica “reforma” judicial que tanto ha dividido a la sociedad.
De todos modos, es imperioso aclarar: por ahora, no hay elecciones en puerta y mucho puede cambiar hasta el momento que la ciudadanía vaya a las urnas, sea antes de tiempo o cuando termine por ley el período del gobierno electo el año pasado. También debemos agregar que los sondeos, por más serios que sean, no son ciencia absolutamente exacta.
Sin embargo, sí son un elemento al que se recurre muy a menudo en Israel y en muchas ocasiones han vaticinado claramente escenarios políticos en el país.
Los resultados
Para entenderlos, hay que recordar que la Kneset, Parlamento de Israel, tiene 120 escaños y que para que el gobierno pueda entrar en funciones, la coalición debe tener mayoría parlamentaria de por lo menos 61 escaños, la mitad más uno. Lo que cuenta no es cuál es el partido mayoritario sino quién logra formar un bloque que lo apoye.
Pero primero, las preguntas sobre el sentir de la ciudadanía, de las cuales se desprenden también las respuestas acerca de cómo votaría la gente.
1) A la pregunta sobre la sensación de seguridad con la que vive en este momento la ciudadanía, de 0 a 10, el promedio es 3.92.
2) En cuanto a si confían en el gobierno en su lucha contra el terroriso, e 60% no confía y solamente el 27% responde positivamente. El 13% no sabe qué responder.
Entre los votantes del Likud, el 48% confía y el 41% no.
3) Sobre el desempeño de Netanyahu como Primer Ministro, el 71% dice que no es bueno, el 20% que sí lo es y el 9% no sabe qué responder.
Entre los votantes del Likud, el 28% dice que no es bueno y solamente el 38% responde que sí lo es.
4) ¿Qué escenario prefieres?
El 33% prefiere un gobierno de unidad de Netanyahu con el jefe de la oposición Yair Lapid o con Beni Gantz, jefe de “La Unión Nacional” de oposición.
Otro 33% prefiere ir a elecciones.
Un 25% quiere que siga el gobierno actual.
El 9% no sabe qué responder.
Entre los votantes del Likud, menos del 43% quieren que siga el gobierno actual.
De esto se desprenden los siguientes resultados:
1) Si se llevaran a cabo hoy las elecciones, el bloque que constituyó hasta hace unos meses la así llamada “coalición de cambio” – que hoy está en la oposición- obtendría 64 de los 120 escaños de la Kneset. Esto incluye al partido árabe Ra´am que ya estuvo en la coalición anterior. La actual coalición, el gobierno de Netanyahu, obtendría 46. Y los partidos árabes Hadash-Taal y Balad tendrían 10 escaños.
2) En cuanto a la votación por partidos, los resultados son impactantes. El Likud pasa a ser el tercer partido de Israel. Y también dentro de la oposición hay tendencias muy noticiosas, al ampliarse la ventaja que el ex ministro de Defensa Beni Gantz abre frente al jefe de la oposición Yair Lapid.
Según el sondeo, si fueran hoy las elecciones, “La Unión Nacional” de Beni Gantz recibiría 29 escaños, “Yesh Atid” de Yair Lapid 21 y el Likud de Netanyahu 20.
“Otzmá Iehudít” de Itamar Ben Gvir y “El Sionismo Religioso” de Betzalel Smotrich reciben juntos 11, el ultraortodoxo SHAS 9 y el también haredi Yahadut Hatorá 6. El partido árabe Hadash-Taal de Ahmed Tibi y Ayman Odeh recibirían 6, Ra´am de Mansur Abbas 5, Israel Beiteinu de Avigdor Liberman 5 y tanto el laborismo (de Merav Mijaeli) como el partido árabe Balad recibirían 4 cada uno. Estos dos últimos, en otros sondeos, no logran ser electos, un escenario que cambiaría todo)
Una pregunta muy común en los sondeos en Israel se refiere a quién es percibido como más apto para ser Primer Ministro.
Cuando las opciones son Netanyahu y Yair Lapid, el actual jefe de la oposición recibe 41% y Netanyahu sólo 37%.
Cuando las opciones son Netanyahu y Beni Gantz, pues Gantz recibe el 51% y Netanyahu solamente el 34%.
La crítica del periodista Amit Segal
Amit Segal es el cronista y comentarista de política interna y temas de partidos en el canal N12 de la televisión israelí. Comentó en las redes sociales el sondeo cuyo resumen publicamos aquí y señaló que no le parece exacto realizar una encuesta así en los días de media fiesta en la semana de Pesaj (Jol Hamoed) en los que mucha gente está de vacaciones familiares fuera de su rutina.
Pero también él ve el proceso de continuo deterioro que está sufriendo la coalición actual. Sin embargo, estima que el bloque Netanyahu no puede que haya bajado tanto a sólo 46 escaños y estima que está más cerca de “entre 55 y 58”. Esto, claro, sin una encuesta, sino en base a su percepción. Cabe señalar que también eso significa estar en clara minoría.
