Por Nicole Lampert
Fuente: https://www.thejc.com/
Los desafíos de ser judío en Twitter han unido una improbable alianza de judíos
Mi relación con Twitter es un poco como mi relación con mi religión. Es complicado ser un judío que realmente no puede leer hebreo y no está seguro de creer en Dios. También es complicado estar en un sitio donde recibo insultos a diario, pero he encontrado amigos con ideas afines a quienes les puedo contar mis secretos más profundos y oscuros.
Si bien ciertamente estoy al menos parcialmente de acuerdo con las reflexiones de David Baddiel de que los judíos de Twitter no somos tan poderosos como nos gustaría ser, no podría estar más en desacuerdo con su tesis de que no somos una comunidad.
Somos JTTwitter Puede que seamos los grupos de Twitter más ruidosamente discutidores pero, como le expliqué una vez a uno de mis desconcertados editores no judíos que me vio en medio de una discusión y me preguntó si estaba bien, el debate es parte de nuestra cultura. .
Dios, discutimos. Pero cuando llega el momento, nos unimos. Me gustaría pensar que British JTTwitter ha liderado el camino en este forzado, como estábamos, a dejar de lado nuestras innumerables diferencias para luchar contra el antisemitismo laborista. Aparte de los judíos simbólicos tan amados por la BBC que repetían como un loro "Jeremy Corbyn no tiene un hueso racista en su cuerpo", el líder laborista logró lo impensable y nos unió a todos.
Durante ese breve tiempo, los judíos de izquierda, los judíos de derecha, los partidarios del Brexit se unieron para luchar contra el antisemitismo y, para muchos de nosotros, Twitter fue donde lo hicimos. Y donde todavía lo estamos haciendo.
Hay estrellas de JTTwitter británico como el bloguero David Collier (@mishtal) que tiene 86.000 seguidores en sus blogs habituales que descubren el antisemitismo, Gnasher Jew (@GnasherJew) un colectivo anónimo que busca el antisemitismo de izquierda y derecha, y la abuela Gillian Lazarus (@ GillianLazarus) que entra en las cuentas de Facebook de Corbynista y expone el horrible antisemitismo que aún se puede encontrar. Todos ellos tienen estómagos más fuertes para este tipo de cosas que yo.
También están Dave Rich (@daverich1) del CST y el académico David Hirsh (@DavidHirsh) que resumen el antisemitismo de una situación, Jo Bell (@jobellerina) que puede ensartar brillantemente a un antisemita de un solo golpe, Fiona Sharpe (@SharpeFiona) , la siempre sensata portavoz de Labor Against Antisemitism, y los cineastas judíos Joosy Joo (@JoosyJew) y Milk Media (@milkmedianewyor).
Y luego están las celebridades judías que forman parte de JTTwitter Tracey Anne Oberman (@TracyAnneO), Rachel Riley (@RachelRileyRR) y el cómico nominado al Oscar Lee Kern (@leekern13).
Nos verás en #jewtitter al aire libre, apoyándonos mutuamente durante las disputas, dándonos Me gusta y retuits. Y discutiendo, por supuesto.
Menos abiertamente son los grupos de mensajería privada. Comprobando la salud mental de los demás, analizando formas de responder a nuevos desafíos, discutiendo ideas, riendo. Y discutiendo, por supuesto. A veces también puede ser difícil mantenerse al día con quién odia a quién.
El TTwitter británico ha tenido algunas victorias considerables, la más reciente fue lograr que el Royal Court Theatre se retirara de otra obra antijudía. Los productores del teatro, en su sabiduría, ignoraron al menos a dos personas que trabajaban en la producción Rare Mettle Earth diciéndoles que usar el nombre Hershel Fink para su megalómano no judío codicioso multimillonario malvado era antisemitismo.
Eso fue hasta que, solo unos días antes de la noche de estreno, el productor de teatro Adam Lenson (@AdamLenson) lo señaló y todo jewtitter se unió. El resultado final fue la obra Judíos. En sus propias palabras, que se inauguró la semana pasada y ensartó al menos algunos de los delitos menores anteriores de la Corte Real.
También fue el JTTwitter británico el que obligó a miles de usuarios de alto perfil a abandonar el sitio durante 48 horas después de que el rapero británico Wiley lanzara una diatriba antisemita en julio de 2020. Dejado por @NudderingNudnik y Tracy Ann, obligó a la empresa de redes sociales al menos considerar su problema con el antisemitismo y el racismo, incluso si ese problema sigue siendo tan endémico como siempre.
Igual de importante, sé que nuestro trabajo ayudó a mostrar los problemas endémicos en el Partido Laborista de Corbyn.
No es de extrañar que el jewtitter americano admire nuestro valiente espíritu de lucha que están emulando a medida que las universidades estadounidenses, en particular, se convierten en lugares de odio: dos de mis jewtitter estadounidenses favoritos son el intrépido periodista Bari Weiss @bariweiss y Blake Flayton (@blakeflayton) que comenzaron tuiteando sobre estas cosas cuando era estudiante. Y, por supuesto, el jewtitter israelí con las activistas Hen Mazzig (@HenMazzig) y Emily Schrader (@emilykshcrader) y la intrépida feminista judía etíope Ashager Araro (@AshagerAraro), personas a las que admiro y con las que me he conectado.
Gracias a JTTwitter ahora tengo amigos judíos en todo el mundo y que son de todo tipo de judaísmo. Los viernes por la noche sube el grito de JTTwitter de #ShabatShalom y es bastante hermoso: la diáspora uniéndose.
Porque no se trata solo de luchar contra el antisemitismo. Gracias a la comunidad de jewtitter he aprendido sobre los asombrosos judíos del pasado y del presente, he aprendido sobre nuestra historia y nuestro arte, nuestros idiomas y nuestra comida. Mientras discutimos sobre si la comida Ashkenazi o Sefardí es mejor, y si es bagel o beigel, estamos haciendo esto como una comunidad que está más conectada que nunca debido a las amistades que hemos hecho.
El judaísmo nunca se ha tratado solo de leer hebreo o creer en Dios. Somos un pueblo. Y aunque seamos pocos (hay antisemitas con más seguidores en Twitter que judíos en el mundo), todos son libres de unirse a nuestra desordenada pandilla ruidosa.
