La ocasión siempre festiva de la ceremonia con la que se concluyen distintos cursos en el marco de las Fuerzas de Defensa de Israel, va más allá de la emoción de los jóvenes soldados que reciben sus rangos y el orgullo de sus padres. Es una ocasión para escuchar los mensajes centrales de las autoridades que se dirigen a los presentes, tanto el Primer Ministro Biniamin Netanyahu como el Comandante en Jefe del Estado Mayor de las Fuerzas de Defensa de Israel Teniente General Herzi Halevi.
La ceremonia llevada a cabo este jueves 31 de octubre al finalizar el septuagésimo curso de oficiales de combate de las fuerzas terrestre, con 535 egresados, no fue la excepción. De fondo, recordemos el escenario general: ya casi 400 días desde la masacre en el sur del país, de la que derivó la guerra contra Hamas, la guerra contra Hezbolá y una nueva etapa en el conflicto con Irán, considerado la cabeza de la serpiente, según sostiene Israel, del Eje del mal.
Entre los flamantes oficiales, hay quienes fueron heridos en combate y al recuperarse volvieron a luchar, y quienes perdieron a amigos combatiendo en la guerra.
Vale la pena leer los puntos centrales del discurso pronunciado por el Primer Ministro Netanyahu.
“Estamos desmantelando el eje del mal al que nos enfrentamos, con golpes calculados. Ya no habrá ejércitos terroristas en nuestras fronteras. Hamás ya no gobernará en Gaza y Hezbolá no se sentará en nuestra frontera norte, en posiciones a pocos metros de nuestra frontera, desde donde podría invadir. Esto ya no sucederá. También estamos cortando las tuberías de armas de Irán a Hezbolá, a través de Siria y de allí al Líbano”, dijo en una afirmación contundente y muy optimista en cuanto a lo que será el desenlace de la guerra en curso.
Dado que en los últimos días se habla intensamente de los renovados intentos de lograr un alto el fuego en la guerra entre Israel y Hezbolá, al multiplicarse los esfuerzos de Estados Unidos al respecto y pronunciarse distintas figuras libanesas sobre el tema, Netanyahu hizo unas aclaraciones claves:
“En cuanto a las conversaciones sobre un acuerdo en el Líbano, me gustaría dejar en claro: los acuerdos, documentos, propuestas y números -1701, 1559- con el debido respeto, no son el punto principal. El punto principal es nuestra capacidad y determinación para hacer cumplir la seguridad, frustrar los ataques contra nosotros y actuar contra el suministro de armas a nuestros enemigos, según sea necesario y a pesar de cualquier presión y restricciones. Este es el punto principal”.
Cabe recordar que las resoluciones que mencionó, la 1701 que prohibía la presencia de Hezbolá al sur del río Litani y la 1559 que exigía su desarme, nunca fueron cumplidas. Todo lo contrario.
El Primer Ministro se refirió también a la situación con Irán, que además de sus ataques a Israel a través de sus proxies regionales, le atacó en forma directa el 14 de abril y con mayor fuerza el 1 de octubre, a lo cual Israel respondió hace casi una semana con un exitoso operativo contra decenas de blancos militares en diferentes partes de Irán.
“En cuanto a Irán, golpeamos su punto débil”, dijo el Primer Ministro. “ Las palabras altivas de los líderes del régimen iraní no pueden ocultar el hecho de que hoy Israel tiene en Irán una libertad de acción mayor que nunca. Podemos ir a cualquier parte que necesitemos en Irán”. Y recalcó el punto central de todos, porque es el mayor peligro para Israel: “El objetivo supremo que he establecido para las Fuerzas de Defensa de Israel y los servicios de seguridad es impedir que Irán obtenga armas nucleares. Detener el programa nuclear ha sido –y sigue siendo– nuestra principal preocupación. No he quitado, no hemos quitado y no quitaremos la vista de este objetivo. Obviamente, no puedo detallar nuestros planes para lograr este objetivo supremo”.
El mensaje del jefe del ejército
Como oficial número uno de las Fuerzas de Defensa de Israel, que implementa en el terreno lo que decide el gobierno, pero tiene un amplio margen de maniobra en cuanto a cómo hacer cumplir las órdenes , también el Teniente General Herzi Halevi se dirigió a los jóvenes oficiales . Primero habló de cómo encarar la nueva etapa que están iniciando, especialmente en una situación tan demandante como la que vive Israel.
Y pasó a un corto resumen de la guerra.
“El año pasado dañamos gravemente a Hamás, matando a cientos de sus comandantes y miles de sus agentes, destruyendo infraestructuras de producción y combate e inutilizando muchas de sus capacidades militares y gubernamentales.
Infligimos graves daños operativos y morales a Hezbollah, eliminamos su cadena de mando, socavamos su seguridad y alteramos sus capacidades. Impedimos una escalada generalizada en Judea y Samaria, matamos a cientos de terroristas y frustramos numerosos ataques. Nuestro largo brazo llegó hasta Yemen e Irán de manera aguda y precisa. Tenemos muchas más tareas para continuar”.
Recordó a los civiles muertos este jueves por el disparo de cohetes de Hezbolá hacia el norte de Israel, señalando que “no hay guerras sin precios”.En el primer ataque letal del día,murió un agricultor israelí judío en Metula, y con él murieron también cuatro trabajadores del exteriores que lo ayudaban en las plantaciones. Horas más tarde, murieron dos ciudadanos árabes israelíes , madre e hijo, cuando estaban recolectando aceitunas. Con ellos, ascendió a 5 la cantidad de ciudadanos árabes muertos por los cohetes de Hezbolá en los últimos días.
Halevi puso énfasis en el drama de los secuestrados, 101 personas que aún están en la Franja de Gaza.
“Durante todo este tiempo, no nos olvidamos de los secuestrados que Hamás mantiene cautivos y trabajamos constantemente para su regreso. Este es un objetivo de guerra. Hemos hecho mucho por ello, hemos traído a muchos de regreso. Somos responsables del hecho que están allí y debemos continuar actuando con urgencia. Debemos apresurarnos y recuperarlos. Este es nuestro deber moral”. Y aseguró: “Conseguiremos la victoria, de la que el regreso de los secuestrados es una parte importante y necesaria”.
Al finalizar, envió un emotivo mensaje a los jóvenes oficiales:
“Estoy muy orgulloso de ustedes por haber elegido ser comandantes de las Fuerzas de Defensa de Israel en este momento crucial para el futuro del Estado de Israel. Confiamos mucho en ustedes.
Sean héroes, conozcan la medida correcta, piénsenla. Ni diluvio ni sequía, sino comandancia que traiga bendición”.