Ya antes de confirmarse oficialmente si en su fuerte ataque a la comandancia subterránea de Hezbolá en la Dahia en Beirut Israel logró realmente eliminar a su jefe máximo Hassan Nasrallah, está claro que la noche de este viernes 27 de setiembre es la más dramática de la guerra entre Israel y Hezbolá.
Ante todo, quedó claro totalmente que Israel se quitó los guantes en su ofensiva contra la organización chiita que es desde comienzos de los 80 el brazo de Irán en Líbano. La figura de Nasrallah es clave porque él fue quien convirtió a Hezbolá en una organización terrorista de tamaño y poderío monstruosos, pero también la infraestructura militar misma de la organización es un elemento central. Y según diferentes fuentes citadas por los medios israelíes, parece claro que en el ataque habría muerto enorme cantidad de miembros de Hezbolá que estaban en la comandancia.
Estaba claro de antemano que Hezbolá intentaría responder, y lo hizo disparando decenas de cohetes y misiles a Safed, Naharía y Carmiel, lo cual detonó repetidamente las alarmas.
Tras el fortísimo ataque que abrió un gran cráter en la Dahia, el bastión de Hezbolá en la zona chiita en Beirut, Israel siguió atacando posiciones de la organización en el sur libanés, destruyendo lanzadores de cohetes y escondites de misiles en varios puntos del sur libanés, incluyendo en la zona de Tiro.
Y pocas horas después anunció de antemano que atacará tres edificios puntuales en la Dahia en los que le consta que Hezbolá guarda armas estratégicas que acumuló durante años. El portavoz militar dio inclusive ante las cámaras los nombres de los edificios, exhortando a sus habitantes a abandonarlos de inmediato, lo cual tiene un efecto sicológico claro porque muestra el nivel de la información en manos de Israel. Esto, combinado con la disposición a actuar, irradia gran potencia.
Vale la pena leer los comunicados de Daniel Hagari, portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel, especialmente ilustrativos.
Esta fue su aparición ante cámaras, corto rato después de confirmarse que había habido un ataque potente en Beirut.
“Hace unos momentos, las Fuerzas de Defensa de Israel llevaron a cabo un ataque preciso contra la sede central de la organización terrorista Hezbolá, que sirvió como epicentro del terror de Hezbolá.
La sede central de Hezbolá fue construida intencionalmente debajo de edificios residenciales en el corazón de Dahia, en Beirut, como parte de la estrategia de Hezbolá de utilizar a los libaneses como escudos humanos.
El 8 de octubre, Hezbolá comenzó a atacar a Israel.
Después de casi un año de que Hezbolá lanzara cohetes, misiles y drones suicidas contra civiles israelíes, después de casi un año de que Israel advirtiera al mundo y le dijera que había que detener a Hezbolá, Israel está haciendo lo que todo estado soberano del mundo haría si tuviera una organización terrorista que busca su destrucción en su frontera, tomando las medidas necesarias para proteger a nuestro pueblo para que las familias israelíes puedan vivir en sus hogares, de manera segura y protegida”.
Un rato más tarde, llegó el otro anuncio dramático de Hagari, que dejó en claro que el mensaje central de la noche iba mucho más allá del intento de eliminar a Hassan Nasrallah. A continuación, su resumen:
“Como parte de la amplia operación aérea para degradar la infraestructura y las capacidades terroristas de Hezbolá , nos estamos preparando para llevar a cabo ataques contra bienes estratégicos que Hezbolá ha escondido bajo tierra debajo de tres edificios en el corazón de la Dahia en Beirut.
A lo largo de los años, Hezbolá ha desarrollado un arsenal de misiles antibuques, suministrados por Irán.
Hezbolá ha amenazado y, en el pasado, ha llevado a cabo ataques contra rutas marítimas de transporte marítimo mundial.
Hezbolá también ha llevado a cabo ataques contra buques de transporte civiles y militares israelíes.
El propio Hassan Nasrallah ha amenazado instalaciones estratégicas críticas del Estado de Israel, tanto en el mar como en tierra.
En los últimos días, hemos expuesto cómo Hezbolá esconde sus armas en casas y pueblos en todo el sur del Líbano y en el valle de Beqaa.
Ahora, revelaremos cómo almacenan armas estratégicas bajo edificios civiles en el corazón de Dahieh en Beirut.
En el corazón de Dahieh en Beirut, Hezbolá construyó tres edificios con espacios subterráneos designados para almacenar armas estratégicas, con los edificios de arriba actuando como escudo.
En la ilustración que se presenta a continuación, se puede ver cómo Hezbolá lo hizo. Entre el minuto 2´16” y ´33” aparece la ilustración en cuestión.
Al entrar y descender al nivel del estacionamiento, hay una instalación de almacenamiento de armas estratégicas.
Hezbolá ha almacenado estas armas estratégicas debajo de la población civil.
La forma en que se almacenan los misiles en estos edificios permite trasladarlos y lanzarlos fuera de ellos en cuestión de minutos.
Esto supone una amenaza real e inmediata para las rutas de navegación mundiales y la infraestructura estratégica crítica de Israel”.
A continuación, el anuncio puntual sobre el inminente ataque .
“En la última hora, nos hemos puesto en contacto con los residentes de los tres edificios de la Dahia; estos residentes se encuentran por encima y cerca de los activos estratégicos de Hezbolá y deben evacuar de inmediato por su seguridad. Salgan ya.
Dentro de poco vamos a atacar”.
A partir del minuto 2´48” se puede ver en el video la iustración inclusive con los nombres escritos en árabe sobre el mapa, de los tres edificios mencionados.
“Los residentes de los siguientes edificios del barrio de Hadath (el complejo de edificios "Al Salam", el barrio "Laylaki", el edificio "Monir Shadid" y el barrio "Elhadad", el edificio "Sheit") deben alejarse lo más posible de los edificios antes del ataque.
En breve atacaremos las armas almacenadas debajo de los edificios. La explosión, debido a los misiles, puede dañar las estructuras y potencialmente hacer que se derrumben.
Hezbolá explota y pone en peligro a los civiles libaneses, utilizándolos como escudos humanos para sus armas.
No permitiremos que se dirija una amenaza de ese tipo contra los civiles israelíes, las rutas de navegación mundiales y las instalaciones vitales, algo que ningún otro estado soberano permitiría jamás”.
Es notorio que a pesar de sus intensos y fuertes ataques a Hezbolá, Israel se abstiene hasta ahora de atacar infraestructuras del Estado libanés. Pero este viernes lanzó una advertencia sobre el aeropuerto de Beirut: “No permitiremos de ningún modo la transferencia de armas a la organización terrorista Hezbolá. Conocemos las transferencias de armas iraníes a Hezbolá y las estamos frustrando. Los aviones de la Fuerza Aérea patrullan ahora la zona del aeropuerto de Beirut, hasta ahora el Estado del Líbano, a diferencia de Siria, se ha comportado de manera responsable a lo largo de los años y no ha permitido el traslado de armas a través del aeropuerto civil. Lo anunciamos de antemano: no permitiremos que vuelos hostiles con armas aterricen en el aeropuerto civil de Beirut. Este es un aeropuerto civil para uso civil y debe mantenerse como tal".
