Habiendo pasado ya casi dos semanas desde la eliminación en Beirut del jefe militar de Hezbola Fuad Shukur y en Teherán de la del jefe de Hamas Ismail Haniyeh, en Israel se sigue especulando acerca de los planes de Irán y Hezbolárpara atacarle, la envergadura del ataque y más que nada, el momento elegido.
Este domingo circularon intensamente informaciones según las cuales fuentes iraníes señalaban que el ataque estaba por comenzar y que sería de gran entidad. Esto, más que nada por declaraciones atribuidas al jefe de las Guardias Revolucionarias de Irán, diciendo que el ataque de venganza “está en camino”.
El portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel Daniel Hagari comentó las informaciones asegurando que “por ahora no hay cambios en las instrucciones a la población” y asegurando que apenas los haya “se notificará a la ciudadanía”.
Cabe recordar que por la distancia, cualquier tipo de ataque de Iràn se conocerá horas antes de acercarse a territorio israelí.
En los últimos días se señalaba en los medios israelíes que Irán estaba dudando acerca de cómo proceder, considerando que en este momento no tiene interés en el riesgo de una guerra regional de gran envergadura que podría desatarse si Israel responde con mucha fuerza a una ofensiva en su contra.
De Hezbolá, que no ha dado detalles de nada, se estimó todo el tiempo que piensa atacar y que tiene a Israel en vilo como parte de su guerra sicológica.
Sea como sea, no se puede ni descartar ni tampoco asegurar que ya tengan todo decidido, y que sepan, si atacan, cómo lo harán.
Israel lanza sin cesar contundentes advertencias, que son de hecho un intento de disuasión.
El Ministro de Defensa Yoav Gallant declaró que “nuestros enemigos dicen que nos atacarán de forma sin precedentes, pues deben estar prontos a que nosotros les hagamos un daño sin precedentes, atacándolos de forma que nunca han visto”.
En medio de las especulaciones acerca de todos estos manejos-es difícil dar aquí algo como hecho y es más cauteloso reconocer que no son informaciones autorizadas oficialmente- la organización terrorista Hamas anunció que no enviará delegados a la cumbre de este jueves para negociar un acuerdo con Israel por la liberación de los secuestrados.
Por un lado, la delegación israelí que sigue el tema estimó que es parte de la guerra sicológica y que finalmente, Hamas sí asistirá. Pero por otra parte, según analiza el corresponsal político del portal Ynet, el anuncio de Hamas y su jefe Yehia Sinwar puede indicar precisamente que Irán y Hezbolá están por atacar y él no quiere arruinar, ni presentarse como demasiado flexible.
Además podría también indicar que decide esperar, porque un ataque masivo de Irán y Hezbolá podría concretar su sueño de una guerra activa con varios frentes contra Israel.