Uno de los declarados objetivos de la guerra que Israel lanzó contra Hamas a raíz de la masacre del 7 de octubre en el sur del país, es eliminar a la cúpula, a los líderes de la organización terrorista. Indudablemente, el símbolo máximo es Yehia Sinwar, jefe de Hamas en Gaza.
Se lo considera el cerebro y principal artífice de la matanza ,un fanático yihadista dispuesto a sacrificar al pueblo palestino para concretar su ideología de destrucción de Israel. En Israel estuvo en prisión por el asesinato de varios palestinos con sus propias manos, de los que sospechaba habían colaborado con Israel. Es considerado especialmente cruel, hay quienes dicen psicópata. Lo seguro es que fue el nervio motor de la masacre , motivada por su deseo de matar judíos.
El Primer Ministro Netanyahu y su Ministro de Defensa Gallant dijeron repetidamente que es sólo cuestión de tiempo hasta que se llegue a Sinwar.El ejército sostiene que lo buscan en los túneles y que en más de una ocasión llegaron a sitios en los que él había estado poco antes. Semanas atrás Israel reveló un video captado por una de las cámaras de un túnel, en el que se lo reconoció a él, de espaldas, huyendo por un túnel junto a su esposa y algunos de sus hijos.
Este es el video revelado este martes de noche por el portavoz de @IDF Daniel Hagari: el jefe de Hamas, Yehia Sinwar, caminando por un túnel debajo de Khan Yunes, con su esposa y 3 de sus hijos, en camino a un lugar seguro. Es del 10/10, tres días después de la masacre. Al frente… pic.twitter.com/l5QaWiFsgk
— Jana Beris (@JanaBeris1) February 13, 2024
La gran pregunta es si acaso Israel llegará a él. Y si lo logra ¿qué prefiere la ciudadanía? ¿Vivo o muerto? Si vivo, sería para juzgarlo así como se juzgó a Adolf Eichmann , lugarteniente de Hitler, a comienzos de los años 60,por los crímenes cometidos durante la Shoá contra el pueblo judío.
Sea como sea está claro que será complejo ya que todos tienen claro que Sinwar debe estar rodeado de secuestrados israelíes a los que usa como escudos humanos. Cuando volvió de su cautiverio Yojeved Lifshitz, reveló que Sinwar se había presentado ante ellos, varios de los secuestrados. Le sorprendió su baja altura y el buen hebreo que hablaba. Hay quienes dicen que quizás ella se equivocó en la identificación,pero Lifshitz insiste en que a quien vio fue a Sinwar.
Sin olvidar que el pueblo israelí en general ve a Sinwar como un enemigo, es especialmente relevante preguntar a las víctimas de Hamas – sean familiares de secuestrados, sobrevivientes de la masacre o habitantes de la zona atacada desde hace años por cohetes desde Gaza-qué destino quisieran que corra Sinwar.
Cuando cubrimos semanas atrás el viaje de una gran delegación de familiares de secuestrados a La Haya a presentar una denuncia contra Hamas en la Corte Penal Internacional, conversamos entre otros con Izhar Lifshitz cuyos padres octogenarios fueron secuestrados en el kibutz Nir Oz, de su casa que quedó totalmente carbonizada. Su padre Oded sigue en manos de Hamas tras la liberación de su madre en noviembre. “Esto muestra que estamos persiguiendo a los líderes de Hamás no sólo militarmente sino también en el plano jurídico.Sinwar y los demás líderes de Hamas son el brazo pensante e ideológico de la masacre y realmente espero que podamos verlos detrás de rejas”.
Izhar destaca la importancia del versíbulo bíblico “Justicia, Justcia peseguirás”. “Sería bueno poder llevarlo a juicio y que el mundo todo pueda escuchar los testimonios de los supervivientes y los liberados sobre lo que les ocurrió”.
Eyal Eshel viajó en el avión a La Haya llevando la ampliación de una foto de su hija Roni que a los 19 años fue asesinada con otras 15 jóvenes soldadas encargadas de la observación de la frontera a través de sus pantallas. Pero considera que hay que luchar. “ En primer lugar nuestro objetivo es la justicia en sí”, dice Eyal. “Espero que para el bien de todos nosotros, lo atrapen en vida para que el mundo entero vea cómo lo juzgan. Tiene que ser juzgado”.
Ruben Friedmann, del kibutz Ein Hashlosha ubicado a 2.4 kms de la frontera con Gaza, siente que es un sobreviviente . Estuvo 30 horas encerrado en el refugio de su casa con su esposa Estela y ahora resume lo ocurrido diciendo que “aunque suene raro decirlo, relativamente tuvimos suerte porque en nuestro kibutz no hubo decenas de muertos como en otros lados”. Con cautela,dice que en Ein Hashlosha hubo 5 asesinatos.
“El dilema del gobierno israelí no es tal. Como país democrático y para que el mundo no olvide las atrocidades cometidas bajo su mando al frente del Hamás, lo mejor sería atraparlo vivo y juzgarlo publicamente”, sostiene Ruben.
Recuerda el juicio sin precedentes llevado a cabo a comienzos de los años 60 del siglo pasado en Jerusalem a Adolf Eichmann, lugarteniente de Hitler, responsable de la así llamada “solución final”, el exterminio de los judíos de Europa. “Quizás estaríamos ante un juicio Eichmann II , que atraería la atención mundial y daría pie para mostrar la verdadera cara de la organización terrorista y sus líderes”. Eichmann fue hallado culpable de crímenes de lesa humanidad y sentenciado a la pena capital.
Pero Ruben Friedmann es realista y estima que son “casi ínfimas” las chances de atrapar a Sinwar con vida. “Él y todos los demás que planificaron la masacre, deben ser perseguidos sin término de tiempo, tal cual Estados Unidos persiguió a Bin Laden después de los atentados de las Torres”.
Daniel Weisz,también de Ein Hashlosha, pasó momentos muy duros aquel 7 de octubre .El no se hallaba en el kibutz pero su hija Natalie sí, con sus tres niños pequeños, uno de ellos de aproximadamente un mes, encerrada en el refugio mientras su esposo se refugiaba en el tambo, donde estaba trabajando cuando empezaron a sonar las alarmas.
“Yo quiero que primero le hagan juicio público. Y que allí lo sentecien a muerte“, sostiene categóricamente.