Tal como estaba anunciado, desde este domingo 18 de abril, en Israel ya no es obligación salir a la calle con mascarilla cubriendo la nariz y la boca. El Director General del Ministerio de Salud Pública Profesor Hezi Levy firmó el sábado de noche la orden definitiva al respecto, lo cual es visto por la población israelí como uno de los más claros símbolos de la significativa mejoría en la situación general.
Por otra parte, los alumnos de todo Israel han vuelto a clase en forma presencial y no en cápsulas.
Estos son los dos grandes acontecimientos en Israel al iniciarse la semana, mientras continúa la mejora en los números de la pandemia en todo el país. Según los datos publicados por el Ministerio de Salud Pública este domingo de mañana, en las 24 horas anteriores fueron 82 los confirmados con Covid-19. Siguen reduciéndose los números de los internados en grave estado , que en este momento son 206 en todo Israel, de los cuales 122 están conectados a respirador.
El número de vacunados con la primera dosis asciende a 5.343.094 y con la segunda, 4.969.853 personas.
Sin barbijos
La cancelación de la obligatoriedad de usar mascarilla en la vía pública es una clara indicación de la gran mejoría en la situación general, aunque las autoridades del MSP sostiene que es imperioso estar atentos especialmente a la eventualidad que entren al país variantes peligrosas que sean más resistentes a la vacuna . Para esto, es clave el funcionamiento de los reglamentos de control en las fronteras, así como del recientemente creado Centro Nacional de Secuencias genéticas, en el que se puede detectar cada variante.
Es interesante que a pesar de la nueva etapa recién iniciada en cuanto a la mascarilla, por las calles se ve claramente a no poca gente aún llevándola puesta. Puede ser cuestión de costumbre, de extremo cuidado de algunos y probablemente más que nada por el hecho que su uso continúa siendo obligatorio en lugares cerrados, o sea que no se puede salir de casa sin la máscara .
Es más: el Profesor Najman Ash, coordinador máximo a cargo de la lucha contra el Coronavirus, declaró en una entrevista al portal Ynet que teme que la nueva reglamentación según la cual ya no es obligación usar tapabocas en la vía pública, derive en un menor cumplimiento de las normas en lugares cerrados. Pero los números de la pandemia, que han ido en continuo y significativo descenso, han hecho ya ineludible llegar a este momento.
El MSP recomienda de todos modos a la población sí usar máscara a la intemperie, si uno está en medio de una aglomeración, aunque no sea obligatorio. Pero ello dependerá del criterio y decisión de cada ciudadano.
A clases
La otra gran noticia –en realidad, la principal- es que este domingo volvieron a las clases presenciales todos los alumnos de Israel, tanto de primaria como de secundaria, y no en cápsulas separadas sino todos juntos, en aulas completas, inclusive en colegios en los que hay 40 niños o jóvenes en una misma clase.
Esto requerirá un seguimiento especial y mucha atención a eventuales contagios, dado que se trata de un sector de la población que no está aún vacunado. Se estima que dentro de muy poco comenzará la vacunación de los niños de entre 12 y 15 años, el primer segmento que se agregará tras incluirse en la campaña nacional a los jovencitos de 16 y 17 años. Pero aún restará una mayoría de alumnos no inoculados, por cierto toda Primaria.
El regreso de los alumnos a clase constituye un desafío desde varios puntos de vista.
Hace exactamente un año y un mes, Israel inició el primer cierre por la pandemia, que fue absoluto. Desde entonces, de acuerdo a la situación, se fueron abriendo y cerrando las escuelas y secundarios, pero no se volvió en ningún momento a la normalidad total. Aquellos que en cierto punto retornaron a clase, lo hicieron en cápsulas y sólo unas veces por semana. El zoom continuó siendo lo predominante, lo cual derivó en compliaciones sociales y hasta sicológicas en algunos casos.
En todo el país, son numerosas las clases en las que niños y jovencitos verán por primera vez a la mayoría de sus compañeros, aunque a esta altura del año en Israel ya se está cerca del fin de los estudios, que para primaria es el 30 de junio y para los liceales ya unas semanas antes.
Especialmente difícil fue la situación de los alumnos de 12 a 15 años, que quedaron afuera aún cuando otras clases volvían a estudios presenciales por un tiempo. Esa capa etaria, por distintas razones, casi no fue incluida en el alivio de las restricciones que hubo cada tanto.
La nueva etapa, aunque con mucha esperanza, requerirá un seguimiento de cerca de parte de los docentes, un esfuerzo que deberá ir mucho más allá del deseo de cumplir el programa curricular.
