Fotos: Limor Tzadok
En las últimas semanas han circulado muchos comentarios entre preocupados y furiosos en el mundo judío, por declaraciones del Papa Francisco según las cuales le han dicho que Israel estaría cometiendo un genocidio en Gaza y él consideraba que eso debía ser investigado. Hubo quienes lo calificaron de inmediato de antisemita, otros que dijeron que esa declaración de su parte no debe sorprender…y otros que optaron por ser más cautelosos. Personalmente consideramos que declaraciones de ese tipo son irresponsables, además de carentes de fundamento ninguno. Una personalidad de la talla del Sumo Pontífice, en un cargo que tanto influye en millones de personas, no debería lanzar al aire un comentario de ese tipo, que demoniza a Israel, basándose en que "le dijeron". Con el odio antisemita en el mundo y el invento de tantos libelos contra Israel, el Papa debería ser una de las figuras que llama a poner orden y no sumarse a la circulación de acusaciones que ponen como siempre a Israel en el banquillo de los acusados.
Hay distintas formas de reaccionar a un hecho de este tipo, que a nuestro criterio fue un insulto a Israel. Hay quienes abrazan de inmediato la posibiidad de diálogo para explicar y convencer.
Entre ellos está el Rabino Israel Garmon, israelí que reparte su vida entre Israel y Guatemala. Tiene 36 años, está abocado desde hace mucho al diálogo interreligioso tanto en América Latina como en Asia y África.Además es Director del movimiento Mizrahi para Centroamérica y Presidente de la Coalición Humanitaria Internacional que despliega y lleva adelante proyectos humanitarios actualmente en 38 países del mundo.
El Rabino Garmon nació en Jerusalem, su esposa en Francia, su hija en Colombia y su hijo en Guatemala, así que la visión internacional es cuestión de su vida diaria.
Días atrás participó en una delegación de líderes de distintos credos recibidos por el Sumo Pontífice.Teniendo de fondo las declaraciones del Papa con las que abrimos estas líneas, ha sido ampliamente criticado.
El texto a continuación es lo que escribió el Rabimo Garmon en su página de Facebook al respecto, y que nos ha confirmado podemos reproducir.
¿Por qué fui?
Lo más fácil es estar cómodo en la casa y criticar a la gente y al mundo
Lo más fácil es acusar al otro que es antisemita y culparlo en todo por su odio ciego, y así quitar la responsabilidad y seguir pensando que el problema es el otro.
Lo más fácil es criticar y hablar del otro, en lugar de hablar con el otro.
Hay antisemitas, hay odio, hay oscuridad y hay terror, pero no es la única respuesta - excusa para no hacer más.
Recibí muchas críticas por la visita al Papa Francisco y respeto a todos, cada uno tiene su lógica.
Pero para mí lo más importante es unir fuerzas para tener un mundo mejor.
Ir a explicarle de corazón la situación y mostrarle que lo más ridículo es acusar a Israel, cuando Israel arriesga la vida de sus soldados (y le mostré fotos algunos de mis amigos que murieron por eso) para buscar únicamente a los terroristas, aunque podría haber terminado la guerra en un día con suficientes bombas que podían haber eliminado a Gaza totalmente, pero no lo hizo para proteger a los inocentes y por el bien de los palestinos , que deben ser liberados de Hamas.
al judaísmo en su tierra natal y emigró a Israel
Claro que es lo más fácil hacer la paz con el príncipe de Mónaco y con los amigos de Sion, pero en este mundo tan complejo que tenemos, debemos dialogar con todos.
Somos muy diferentes por fuera, pero muy similares por dentro.
Gracias al Papa Francisco por recibirnos con la delegación interreligiosa del mundo, para promover más proyectos humanitarios juntos, y también para darnos la oportunidad de mostrarle que el radicalismo amenaza a todos, y no solamente a los Judíos, tal cual le contaron los líderes Musulmanes que estaban conmigo en la delegación.
Es muy fácil criticar, pero muy difícil actuar.
