Benjamin Giesen, entre la historia y el antisemitismo actual

 El Alcalde de la localidad alemana  Beisefort Benjamin Giesen , de visita  recientemente en Montevideo, fue entrevistado por el periodista Tomás Friedmann, compartiendo sus experiencias sobre la recordación del  Holocausto y sus preocupaciones por el antisemitismo a nivel global. Cabe destacar que el origen de la visita está relacionado al hecho que las historias de Max,  en los libros de Julio Rosenblatt, se desarrollan precisamente en Beisefort.
                       Agradecemos a Tomás que nos haya compartido esta valiosa entrevista para poder publicarla.
                                            
 

¿Cual es la impresión de tu visita a Uruguay?  

Gracias a la invitación de Julio Rosenblat pude llegar a Uruguay y conocer este hermoso país. Tuve la oportunidad de recorrer Montevideo y conocer Punta Carretas, Pocitos, Ciudad Vieja, Goes y me pareció una ciudad muy agradable con gente muy amable.  También visite el Cementerio Israelita de la Paz y varias institucione judías y pude comprobar una colectividad muy activa y muy identificada con Israel. Y además fui al clásico del futbol uruguayo en el Estadio Campeones del Siglo de Peñarol y viví un espectáculo emocionante.

No puedo dejar de mencionar mi visita a Punta del Este, su `puerto, su rambla y la increíble Casapueblo del gran artista uruguayo Carlos Páez Vilaró. 

Sabes que el mundo está experimentando ahora un momento muy especial, con una ola de antisemitismo que no había sido observada desde la Segunda Guerra Mundial. ¿Cómo viven esta situación de antisemitismo en Alemania y en Europa?
 
Hoy en Alemania tenemos una gran discusión en nuestro sistema educativo y en nuestra sociedad para tratar de saber cómo tenemos que reaccionar frente a esta ola de antisemitismo tan fuerte, además con ataques al Estado de Israel. No es un momento fácil y estamos haciendo todos los esfuerzos para transmitir a los jóvenes y a los adultos los valores esenciales de respeto y de condena a toda forma de racismo y discriminación. Hoy la colectividad judía en Alemania, creo que a veces se siente insegura. Y esto me hace sentir mal porque espero que en mi vida en la alcaldía y en mi vida como profesor que nunca volvamos a la época del régimen nazi. Y a veces algunas personas de la sociedad piensan que estamos en camino de volver. Hay que tomar en cuenta además que el partido de extrema derecha en Alemania tiene un 20 % de votos y eso es una alerta que hay que considerar. 

 ¿Sos profesor de ética, cuál es la función que tiene enseñar los valores de la ética para los jóvenes? 

Este es uno de mis temas. Sabes que soy más un profesor de religión protestante pero una parte de la enseñanza religiosa es enseñar valores y ética. Y creo que esta es una de las cosas más importantes que podemos hacer en la escuela. Sí, se puede aprender inglés, se puede aprender matemáticas, pero también se puede aprender en la escuela ética y los valores mas importantes para la vida muchos de los cuales vienen de la tradición judía: familia, solidaridad, respeto, convivencia.

La escuela es un mundo multicultural, cada niño viene de una familia diferente por eso nuestra tarea es la de transmitir esos valores que son comunes para todos.
 
La historia de Max la conoces muy bien gracias a los libros de Julio Rosenblatt, ¿por qué crees que, con esta historia de Max, Julio, ¿logra alcanzar a los niños en las escuelas con tan positivo impacto?
 
Julio tuvo la inteligencia de presentar a Max en libros de cuentos para niños estilo comic en colores e ilustraciones que son muy atractivos para los niños.

Cuando los escolares los leen enseguida se sienten identificados con Max, porque tiene los mismos problemas que ellos: No quieren jugar conmigo, no me invitan a un cumpleaños, no me dejan entrar a la escuela. Los niños hacen preguntas a Julio y después escriben una historia personal asociada a lo que leyeron y escucharon de Max. Y el resultado es fantástico y emocionante. Julio ha logrado enseñar valores y que los niños comprendan que es racismo, antisemitismo y discriminación. No es fácil enseñar estos temas a niños por eso el proyecto de Julio es digno de elogio. Mas de 6.000 niños de 200 escuelas en Uruguay y Alemania ya leyeron a Max. Este año además llegara a Perú. 

Quiero destacar además que recién Julio publico nuevo un libro muy especial, La Verdadera Historia de Max con excelentes ilustraciones en blanco y negro, para ser utilizado en los liceos. 

Se puede leer el libro y se los recomiendo en:  www.max1896.com.ar

Y en Facebook pueden seguir todos lo libros, historias y actividades de Julio, la página se llama MAX 

Tuviste la oportunidad también de ser recibido por el Comité Central Israelita del Uruguay y por autoridades del Centro Recordatorio y Museo del Holocausto.

Fue una reunión muy interesante donde intercambiamos ideas y pude explicar lo que hacemos en mi ciudad para mantener vivo el recuerdo y la presencia judía. Y me impresionó que en el Comité están representadas las diferentes colectividades judías de Uruguay lo que asegura una muy buena representación de los judíos frente a la sociedad uruguaya.

Hemos visitado el Plan Ceibal, este proyecto muy particular que hay aquí en Uruguay para los niños de la escuela. ¿Cuál fue tu impresión de esta idea un niño una computadora?

Por un lado, estamos hablando del libro de Julio, por el otro lado el Plan Ceibal un sistema digital que Julio utiliza para que Max llegue a muchas escuelas fundamentalmente del interior del país.

Realmente quedé muy impresionado por el plan Ceibal y sus alcances para mejorar la educación de los niños uruguayos utilizando tecnologías muy avanzadas. 

Se nota que el país esta utilizando las nuevas tecnologías de la educación para preparar a las nuevas generaciones para los desafíos del futuro. 

Julio contaba las magnificas experiencias a través del Plan Ceibal para tomar contacto con los niños e interactuar con ellos con preguntas y respuestas muy enriquecedoras. 

Usted también ha estado en contacto con estudiantes de secundaria de la Escuela Integral Hebreo Uruguaya aquí en Uruguay. 

Muy lindo encuentro con jóvenes de la asignatura Shoa:  Historia, Memoria y Legado de tercero de bachillerato.

Se mostraron muy interesados en la vida en Beisefort y particularmente en la historia de Max en esa ciudad, de la familia de Rosenblatt y de las actividades para mantener vivo el recuerdo de los momentos tan difíciles y trágicos del régimen nazi y el recuerdo y homenaje a las víctimas. Un encuentro muy gratificante con un docente muy motivado.

¿Como alcalde que proyectos y compromisos tienes mirando hacia el futuro?

Con el apoyo de Julio vamos a seguir trabajando en una serie de actividades relacionadas con Max y con su familia y las otras familias judías que vivían en mi ciudad que totalizaban 25 judíos. Hoy no queda ninguno, pero tenemos sus historias y sus memorias para transmitir los valores del judaísmo. Vamos a seguir trabajando en las escuelas con lesos libros y este año, él visitará otra vez varias escuelas. Y también vamos a inaugurar otras 10 placas recordatorias de los judíos que vivieron en mi ciudad  

¿Qué impresión te llevas de los uruguayos y que mensaje te llevas del país? 

 Pienso que los uruguayos tienen que sentirse orgullosos de su país, de su gente y de sus valores. Un país que recibió a miles de inmigrantes judíos que pudieron desarrollar sus vidas en el país con sus familias, hacer proyectos y convivir con la gente. 

 Un país que hoy sigue recibiendo inmigrantes de países de la región que están en dificultades, mostrando solidaridad, un valor tan importante para la sociedad y el momento que está viviendo la humanidad.

Un país moderno, democrático donde se respetan las instituciones y las reglas. 

Así que me voy con un mensaje de optimismo pensando que tuve la oportunidad de conocer un país diferente del que me llevo muchas experiencias para compartir en mi trabajo en la alcaldía y en la escuela.

Y gracias a ti también Tomás por haber acompañado alguna de mis actividades y haber compartido tus reflexiones como periodista sobre tu país y sobre esta realidad mundial tan compleja que estamos viviendo.