(Por Gabriel Chocron)
N. de Red: Gabriel Chocron,autor de esta nota, es venezolano-israelí, comunicador, Cofundador de Conexión Israel. Fue portavoz de COGAT la unidad de coordinación de las actividades del gobierno en Judea y Samaria, de hecho el brazo civil de las Fuerzas de Defensa de Israel, que funciona como enlace con la población civil palestina, en temas como la entrada de obreros palestinos a Israel y de palestinos que reciben tratamiento médico en hospitales israelíes.
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Hace unos días vi por segunda vez el doloroso video de más de 40 minutos de material original de la masacre del 7/10.
Les comparto algunos de mis pensamientos:
-"Allahu Akbar".
En el video se escuchan decenas o tal vez cientos de veces esa frase. Mientras están decapitando a personas, mientras disparan a mansalva, mientras secuestran, mientras masacran, mientras desfilan cadáveres desnudos.
Su eslogan es su "fe" en la misión "divina" de matar judíos.
No es un tema político, no cambia si la frontera pasa 100 metros más allá o más acá.
El odio extremista está arraigado al punto que pueden creer que Alá está contento mientras cometen esas atrocidades.
¿Quién más grita "Allahu Akbar"?
TODOS los terroristas islámicos.
Sí, los que se vuelan en Paris, los que atropellan en Barcelona o los que tirotean a personas en Bruselas. Y ahí no hay "disputas territoriales" o "ocupación".
Porque la simple verdad es que esto no es por tierra u ocupación, esto es por extremismo islámico.
Por el adoctrinamiento masivo que los hace creer que el otro no tiene derecho a vivir si no se adapta a tus costumbres.
Peor aún, que tienen una orden divina de asesinarlos.
-De hecho, antes de entrar a ver el video me propuse intentar escuchar con mayor detenimiento. ¿En algún momento estos terroristas despiadados antes de decapitar a alguien o pegarle un tiro decían que lo hacían para liberar a Palestina?
La respuesta es NO.
Su único objetivo era matar, matar y matar.
No les importa "liberar a Palestina".
Es más, ni siquiera escuché la palabra Palestina en más de 40 minutos.
Lo que les importa es asesinar judíos.
Mientras más, mejor.
-Tal vez lo más difícil de ver este video, es que mientras uno tiene lágrimas en los ojos y el corazón hecho pedazos, en la pantalla se ve alegría.
Alegría pura.
Alegría pura mientras asesinan.
En la que es probablemente la imagen más impactante del video, se ve un terrorista del Hamas decapitando a un soldado israelí muerto y llevándose su cabeza (mientras todavía tiene el casco puesto).
Y su sonrisa es total.
En otra escena se escucha la llamada de un terrorista a sus padres diciéndole orgulloso que mató a 10 judíos.
Y en otras escenas, MUCHAS, se ven a terroristas y civiles de Gaza celebrando con gritos, cánticos y júbilo cuando ven israelíes muertos, sean hombres o mujeres, soldados o civiles.
En el mundo celebran cuando el equipo local trae a casa el ansiado trofeo.
En Gaza NOSOTROS SOMOS EL TROFEO.
Nuestras mujeres, nuestros padres, nuestros hermanos.
ESO ES LO QUE LOS HACE FELICES.
-Violaciones.
Afortunadamente no publicaron imágenes de los terroristas despiadados violando a mujeres.
Pero se ve claramente en varias ocasiones mujeres jóvenes que tienen los genitales ensangrentados.
No hace falta ser un genio para entender que muy probablemente fueron violadas o al menos violentadas y mutiladas.
-Ver el video por segunda vez me hizo reflexionar sobre las etapas de la propaganda anti-israelí.
Al principio algunos celebraron abiertamente, otros se quedaron callados (tal vez algunos hasta avergonzados de que sus "héroes" pudieran cometer tales atrocidades).
Luego comenzaron a negar la masacre ("Hamas solo mató soldados").
También comenzaron a intentar echar la culpa a Israel (desde el asqueroso "Israel dejó que esto pasara" al manipulador "Israel mató a algunos de los civiles").
Pero no hay que permitir que la propaganda barata, mentirosa y asquerosa de esta gente que celebra la muerte, nos ciegue de la realidad.
Hamas invadió Israel. Hamas asesinó sistemáticamente a personas inocentes.
Lanzaron granadas en refugios anti-bombas. Dispararon contra personas que intentaban escapar. Masacraron a personas que viajaban inocentemente en auto por el sur. Ejecutaron a ancianos en la sala de su casa. Pasaron disparando baño por baño en el festival de música para asegurarse que no sobreviviera nadie. Entraron a una guardería en un Kibutz (probablemente intentando asesinar o secuestrar niños) y terminaron disparándole a una mujer que se escondía ahí.
Todo eso LO VI.
No me lo contaron, lo vi con mis ojos.
Y mi último pensamiento es muy simple.
-ESTO NO PUEDE VOLVER A OCURRIR.
Hamas no se arrepiente de lo que hizo. Es más, siguen diciendo que lo volverían a hacer.
Hace unos minutos incluso publicaron un video jactándose de que Israel descubrió tarde el masivo túnel que construyen cerca del cruce de Erez y lo acompañaban del mensaje "la misión ya fue completada", con videos del día que secuestraron y asesinaron a nuestros seres queridos.
Entonces el compromiso de Israel debe ser simple: no detenerse hasta que esto no pueda volver a ocurrir.
El Estado de Israel le falló a sus ciudadanos el 7/10 cuando no logró protegerlos. Le falló a sus ciudadanos muchas veces antes cuando escuchó al mundo que le pedía cesar el fuego y dejar vivo al Hamas, en lugar de acabar con la amenaza.
Pero aprendimos la dolorosa lección.
Esta vez TIENE que ser la última. Nunca más.
