Con el experto Tal Beerí del centro de investigación ALMA
Hezbolá, creación de Irán en Líbano, es un brazo de la revolución islámica, aunque tiene también su agenda local libanesa, puesta al servicio de su propio fortalecimiento y de los intereses de Teherán. Pero según Tal Beerí, especializado precisamente en el estudio de Hezbolá y la amenaza que constituye, su plan es más ambicioso.
En su opinión, contrariamente a lo que otros expertos alegan, Hezbolá no se ha estado absteniendo de atacar más fuerte a Israel de lo que lo ha hecho desde el 8 de octubre para evitar una guerra total, sino que la buscaba. Sostiene que según el análisis del centro de investigación ALMA, la organización planeaba lanzar una guerra de enorme envergadura contra Israel pero el ataque de Hamas el 7 de octubre la alteró los planes.
Aquí lo explica, en entrevista especial.
P:¿Por qué estima que Hezbolá busca una guerra total?
R:Porque consideramos que eso le sirve a sus intereses. Recordemos que el principal objetivo de Hezbolá es tomar control del Líbano y establecer allí un régimen fundamentalista religioso islámico, un régimen que siga “el espíritu de la revolución islámica”, tal como sucedió en Irán. Para eso fue que Irán estableció el movimiento en 1982. Aunque hayan pasado ya 40 años, tienen tiempo, desde su punto de vista, pueden transcurrir otros 40 años más.
Finalmente, se han fortalecido y han creado una infraestructura de Estado paralela dentro del Estado del Líbano, para lograr dicho propósito. Me refiero a infraestructuras civiles, aparte de las infraestructuras militares que poseen. El objetivo final es tomar control del Líbano. Y una guerra contra Israel es una herramienta que les servirá para dicho propósito.
P: ¿Cuál es la lógica? ¿Por qué les servirá?
R: Porque en cuanto estalle una guerra contra Israel, saben que Israel causará un daño muy significativo al Líbano y también a ellos. Pero para Hezbolá es más importante el posible daño al Líbano, ya que así serán aún más fuertes, a pesar de que ellos se vean damnificados. Considerán que aunque sufran daños, saldrán de la guerra más fuertes que antes en comparación con sus enemigos internos, quienes serán aún más débiles tras una guerra de este tipo.
P: O sea que apuestan a que todo el país sufra, incluyendo sus adversarios, y saben que aunque también Hezbolá sufra pérdidas y daños, de todos modos saldrá de la guerra más fuerte que los demás porque ya ahora es muchísimo más poderoso.
R: Así es. Hezbolá sobrevivirá a una guerra total. Se recuperará rápidamente. Repetirán una vez más la narrativa del defensor del Líbano, salvador del Líbano y el rehabilitador del Líbano; y su estatus se fortalecerá aún más. Por lo tanto, en realidad, una guerra es para ellos un temblor que les permitirá ascender. Una vez más, toda guerra de ese tipo les permitirá avanzar hacia su objetivo, tal como sucedió en 2006. Esta guerra les permitirá avanzar hacia sus objetivos y tienen tiempo…. La próxima guerra será dentro de 10-15-20 años, así que no hay problema, también les permitirá avanzar lentamente hacia dicho objetivo.
A fin de cuentas, la idea es que la toma del poder no es a través del control por la fuerza de una revolución militar, sino que las circunstancias llevarán a que logren el control total del Líbano y entonces podrá establecer el gobierno islámico que desean, siguiendo el espíritu de la revolución islámica iraní.
P: ¿Y dónde queda entonces Israel en ese mapa, en cuanto a los planes de Hezbolá?
R: Una vez que tomen el control total del Líbano, podrán estar libres por completo para dedicarse de lleno a Israel. Hoy, no es que no deseen destruir a Israel, claro que quieren destruirlo, pero primero quieren tomar el control del Líbano y después podrán dedicarse plenamente a destruir a Israel.
P: En los últimos tiempos salen cada tanto figuras libanesas sean políticos o periodistas, criticando a Hezbolá y acusándole de poner en peligro a Líbano. ¿Eso tiene alguna importancia?
R: Ninguna. Son irrelevantes por completo, no tienen peso alguno, no los cuentan. No pueden más que gritar. La base de chiitas que apoyan a Hezbolá es muy fuerte…
P: ¿Toda su base los apoya? ¿No hay chiíes “normales” que le dicen “queremos criar en paz a nuestros hijos”, “déjenos vivir”?
R: Sí, hay gente que no se atreve a abrir la boca, hacia afuera apoyan a Hezbolá, y si hay quienes se atreven a decir algo son una ínfima minoría. Respecto a ellos, Hezbolá actúa con mano muy dura, los trata con violencia física. No lo permite en absoluto decir abiertamente lo que piensan.
P: No se animarán a desafiar a Hezbolá…
R: Bajo ningún concepto. En términos de los chiíes son un “público cautivo”, por tres motivos principales: 1- dependencia económica: su vida diaria depende de Hezbolá, ya que poseen un sistema estatal independiente que no depende del sistema oficial del Estado del Líbano, que se ocupa de los asuntos de la base chií. 2- Temor: aspecto que no conocemos como occidentales. El temor a la unidad de seguridad de Hezbolá. 3- ideología y educación: que reciben al nacer. La santificación del “Jihad” (guerra santa) , la santificación de la “Shaháda” (martirologio) y la santificación de la “Shia”, su versión del Islam. Por lo tanto, es un público cautivo…Esa es la situación en Líbano. Hezbolá es el elemento más fuerte del país.
