Entrevistas

La defensa anti-aérea de Israel, única en el mundo

Lo explica una de sus protagonistas

Hace ya muchos años que Israel comenzó a prepararse para lidiar con las amenazas propias de la era moderna desde distintas fronteras, tanto lejanas como cercanas. Ya no “simplemente” guerras con ejércitos convencionales de países vecinos que atacan con tanques y blindados el territorio nacional, sino más que nada disparo de cohetes y misiles que pueden poner en peligro también a la propia retaguardia israelí. Esto, sin olvidar que también puede haber resultados letales a gran escala con ataques como el lanzado el 7 de octubre, cuando casi 4.000 terroristas irrumpieron a Israel en motos, camionetas y parapentes.

Ya en los años 70 y 80 del siglo pasado Israel era atacado repetidamente por los cohetes Katyusha disparados por la OLP desde Líbano. Luego también por Hezbolá, ya antes de su enorme aprovisionamiento con misiles iraníes capaces de cubrir todo el territorio de Israel.

En 1991 Israel tuvo que enfrentarse a un ataque con misiles poderosos desde lejos,  cuando el entonces dictador de Irak Saddam Hussein disparó 39 misiles Scud hacia el Estado judío. Varios de ellos impactaron en tierra y causaron serios daños. Hubo también víctimas mortales.

Fueron los disparos de cohetes por parte de Hamas desde la Franja de Gaza los que aceleraron la búsqueda de una respuesta a este tipo de ataque, hoy conocida mundialmente, la Cúpula de Hierro.

Pero esa es sólo una de las varias capas del sistema, cuya estructura es precisamente su singularidad, distintos interceptores de acuerdo a la distancia y altura desde la que viene el ataque, pero también evidentemente de acuerdo a su naturaleza, qué tipo de proyectil es.

Para entrar en detalles al respecto entrevistamos a Hila Haddad Chmelnik (40) quien años atrás, entre el 2011 y 2015,  fue parte del proyecto de la Cúpula de Hierro, encargada de los experimentos, abastecimiento y armado de la batería. En su período de trabajo en el programa tuvo el privilegio de vivir aquel histórico 7 de abril del 2011 cuando por primera vez el sistema logró interceptar exitosamente un misil Grad disparado por Hamas desde Gaza hacia la ciudad de Ashkelon.

 

P: Hila, el sistema de defensa anti-aérea de Israel es único en el mundo, especialmente efectivo. Ha llevado muchos años desarrollar algo así ¿verdad?

R: Sin duda. Hace ya 20 se desarrolló el “Jetz” (Flecha) y se entendía desde un principio que sería parte de un sistema compuesto por varios elementos, sistemas defensivos que podrían inclusive actuar junto con sistemas internacionales, así como pasó el 14 de abril, cuando Israel logró frenar el ataque de Irán y contó para ello con sus propias capacidades pero también con ayuda de aliados.

O sea que cada sistema de nuestra defensa anti aérea debe saber “hablar” con otros, por ejemplo el de Estados Unidos. Y eso se sabía de antemano y con eso en mente fue desarrollado, de modo que el sistema pueda “informar” a otros qué está haciendo y al mismo tiempo recibir datos de otros. Esa capacidad de maniobra es lo que permite crear una dinámica especial entre todas sus capas y llegar a un porcentaje muy alto de interceptación de las amenazas, determinar que si tal batería no intercepta, se activa otra que pueda hacerlo, si no intercepta la Cúpula de Hierro, pues puede hacerlo el “Kéla David” (“la “Honda de David”) .

P: Además, todo los sistemas han sido actualizados más de una vez…

R: Sin duda. Se sabía desde un principio que sería necesario, tanto para el Jetz como para los demás.  La Cúpula de Hierro se ha actualizado varias veces desde que empezó a ser operativa. Ahora está el desafío de los drones. 

 

P: ¿Cómo explicar cuál es la principal particularidad del sistema de defensa anti aérea de Israel?

R: Tiene varias capas y se pone en funcionamiento el sistema más apropiado para cada caso, según la distancia, la altura y la rapidez en las que viene un misil en camino. Claro que también según el tipo de amenaza.

P: Eso significa que tiene que haber algo por sobre todas las capas, que decida cuál activar…

R: Exacto. El sistema general es capaz de identificar las amenazas, elabora esa identificación en su cerebro, en su sistema de control y supervisión y luego manda interceptar.  O sea que primero se necesita los ojos que capten, un cerebro superior que decida qué sistema poner en funcionamiento  o sea qué “manos” tienen que actuar. Los radares de cada sistema por separado envían información a la central. También el radar de los sistemas norteamericanos en la región, informan qué ven, por ejemplo si captan drones en camino. Y los radares de la Fuerza Aérea de Israel ven el cuadro completo. Por ejemplo aquel 14 de abril fue un ataque muy grande y había que manejar todo, repartir el esfuerzo y ver que todos los elementos funcionan juntos. 

 

Las distintas capas

P: Hagamos orden. ¿Cuáles son las capas?

R: Primero, en cuanto a alcance-aunque no fue el primer sistema en ser desarrollado- está “Kipát Barzél”, la “Cúpula de Hierro”, que es usada para frenar  grandes cantidades de cohetes relativamente chicos. Cada uno de sus proyectiles, de nombre Tamir, intercepta cohetes y proyectiles , además de drones  relativamente pequeños , que vienen de una distancia corta. La Cúpula fue desarrollada exclusivamente por Israel, pero los proyectiles que usa para interceptar los cohetes enemigos, son fabricados también en Estados Unidos.

 

Luego está el “Kéla David”, o sea “La Honda de David” que intercepta amenazas disparadas de una distancia más grande, misiles crucero, drones más grandes que llegan de distintos puntos, más lejos de nuestras fronteras pero más que nada otro tipo de amenaza. 

 

 

Y después viene el “Jetz 2” (Flecha) que es para distancias mayores y para amenazas como los misiles Scud, los Shihab, misiles que lanzan desde Irán e Irak y ahora también los hutíes desde Yemen. Fue desarrollado conjuntamente con Estados Unidos.

El Flecha 3 intercepta más alto, fuera de la atmósfera, o sea que es cuestión de distancia pero también de altura, de dónde se intercepta la amenaza.

 

P: Y  evidentemente esto no se detiene allí. Israel sigue trabajando en otros sistemas.

R: No hay duda. Luego, se estima que en un año aproximadamente quizás, entrará en funcionamiento el “Maguén or”, que podría traducirse como “escudo de luz” o “protector de luz”, que funcionará con laser, para las amenazas más pequeñas de tamaño.

P: Claro que no se debe publicar números, pero preguntaría si acaso Israel tiene la cantidad de baterías necesarias para cubrir su cielo, o sea para proteger el territorio nacional desde diferentes fronteras.

R: Tenemos suficientes baterías para cubrir el cielo de Israel pero claro que depende de cuántas amenazas sean lanzadas al mismo tiempo . No olvidemos que está también lo que se llama la defensa pasiva.

P: Las alarmas, los refugios, la disciplina de la ciudadanía.

R: Sin duda.

P: Cuando suenan las alarmas ¿tú vas al refugio?

R: Por supuesto. Sé que salva vidas y que además, por más avanzados que sean, los sistemas de defensa anti aérea, como toda tecnología, no son infalibles. Las piezas blindadas que hay en cada casa, protegen claramente de cohetes. Ha habido muchos casos de familias que alcanzaron a correr y refugiarse y cuando salieron vieron que el cohete había impactado en su casa y destruido todo. Pero ellos se salvaron. Así que cuando hay alarma, yo enseguida entro a la pieza segura, y sin duda ninguna cuando estoy con mis hijos especialmente.

P: Tú estuviste a cargo de los experimentos de la cúpula, pero nada se asemeja a la realidad me supongo.

R: Así es. Y cuando el 14 de abril fueron disparados hacia Israel más de 300 drones y misiles, la enorme mayoría de los cuales, o casi todos, fueron interceptados antes de llegar a territorio israelí , vimos una muestra de las capacidades de la defensa anti aérea de Israel. No era un simulacro sino una muestra de la capacidad de Israel. Todos los sistemas funcionaron y quedó demostrado que el sistema general fue un éxito.

P: Con tecnologías tan avanzadas que parecen a veces propias de ciencia ficción ¿cuál es el sueño para la próxima etapa?

R: Claro que desde un punto de vista tecnológico hay mucho todavía por lograr, pero mi gran sueño no es sobre una nueva tecnología sino que la humanidad logre cambiar de rumbo y llegar a la paz. En la guerra en curso ya han sido disparados 20.000 cohetes y misiles de distinto tipo. En tecnología hemos avanzado pero la situación de fondo no ha cambiado. Ojalá también en eso logremos avanzar. 

P: Pero mientras, hay que poder defenderse.

R: Por supuesto. E Israel seguirá haciéndolo al máximo nivel.

 

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Ana Jerozolimski
(05 Agosto 2024 , 11:07)

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(Texto y fotos: Lily Dayton, cristiana israelí residente en Haifa)

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