El Dr. Ricardo Najman, llegado a Israel de su Argentina natal en 1991, soñaba con ser médico forense. Sabía que no sería fácil lidiar, de hecho, con la muerte, no siempre en circunstancias naturales. Pero lo que vio esta semana, no lo imaginó nunca.
Es el Director de la medicina clínico-forense en el Estado de Israel en Abu Kabir, el único instituto de medicina patológica del país. También es el representante del Ministerio de Salud en esta área. Su responsabilidad es tanto en relación a personas vivas como personas muertas que tienen alguna relación con lo que sería lo criminal, desde el punto de vista médico.
Esta es la entrevista.
Hay que tomarse un calmante antes de escucharla.