Compartimos con nuestros lectores MiSinai.
No. 147
Metzorá
Clickear aquí.
Horario de velas de Shabat en Montevideo, viernes 08/04 18:12
Demás localidades ver en www.jabad.org.uy
DETRAS DE CADA NUBARRÓN HAY UNA BENDICIÓN
Por Yossy Goldman
¿Tiene cada nube una cubierta de plata? ¿Hay una bendición disfrazada dentro de cada maldición? Debemos admitir, no siempre es fácil discernir, pero la mayoría de las veces creemos en este concepto.
La lectura de la Torá de esta semana trata de la purificación de aquellos afectados por un extraño mal similar a la lepra conocido como tzaarat (¡Una palabra inexplicablemente similar a tzores!) La Parashá enumera diferentes tipos de manifestación de tzaarat, en el cuerpo de la persona, en sus ropas o, aun en las paredes de su hogar. En el último caso, si tras el necesario período de cuarentena la mancha no retrocedía, las piedras de la pared afectada tenían que ser quitadas y reemplazadas por piedras nuevas.
Imagine que las paredes de su casa son demolidas. ¿Es una bendición o una maldición? No hay duda que el propietario de la casa en cuestión no se sentirá particularmente bendecido. Pero de acuerdo con nuestros sabios, el caso era a menudo diferente para los israelitas que vivían en Tierra Santa. Los anteriores habitantes cananeos de la tierra habían ocultado sus tesoros en las paredes mismas de sus casas. La única manera en que un israelita podía descubrir esos valores ocultos era si las piedras de la casa debían ser quitadas. Cuando esto ocurría, no llevaba mucho tiempo para que el pobre desdichado dueño de casa afectado por tzaarat se transformara en el rico heredero de una recientemente hallada fortuna. Repentinamente su oscura nube se llenaba de una cobertura de plata, oro y toda clase de objetos preciosos. Para él, en un momento, la maldición se convertía en bendición.
Hace un tiempo el negocio de un amigo fue liquidado. Naturalmente él estaba absolutamente desolado. Tras un tiempo abrió un nuevo negocio, el cual, gracias a D-os, prosperó. Posteriormente me confesó que, viéndolo en retrospectiva, pudo ver cómo la anterior bancarrota fue verdaderamente una bendición. Aun recuerdo sus palabras: "Antes trabajábamos para los bancos, ahora trabajamos para nuestras familias".
Una mujer de mi congregación sufría una enfermedad cardiaca y los médicos dijeron que necesitaba una operación de bypass. Pero también tenía otras complicaciones médicas que hacían muy peligrosa la operación de corazón. Su calidad de vida era muy pobre. Si salía a caminar, debía detenerse a descansar cada pocos minutos. Entonces, un día, ella sufrió un ataque al corazón. Fue llevada de urgencia al hospital y los médicos dijeron que su única posibilidad de supervivencia era un bypass de urgencia. Había un 50/50 de oportunidad de éxito, pero si no lo hacían no habría ninguna oportunidad. Llevaron a cabo la operación y, gracias a D-os, se recuperó completamente, disfrutando de muchos años de una calidad de vida grandemente mejorada, con najat de los hijos y los nietos. Por años ella bromeaba "Gracias a D-os tuve un ataque al corazón. ¡Tuve mi bypass!" No era una broma.
Sería ingenuo sugerir que todo funciona siempre así. La vida no es tan simple, y a veces toma mucho tiempo el ver el bien oculto en los traumas y dificultades de la vida. Pero continuamos creyendo que D-os es bueno, que lo que El hace realmente es buscar lo mejor para nosotros y que un día, en retrospectiva, veremos cómo cada una de nuestras frustraciones de alguna manera sirvieron para nuestro bien a un largo plazo.
COMBATIENDO EL EXCESO CON EXCESO
[D-os le dijo a Moisés] “La siguiente es la ley con respecto a la persona afectada con tzaráat.” (Vaikrá 14:2)
La palabra hebrea por una persona afectada con tzaráat (metzorá) se puede ver como una contracción de la frase hebrea para “calumniador” (motzí shem ra), que literalmente significa “alguien que da [a alguien] un mal nombre”. Esto refleja el hecho de que la tzaráat afectaba a la gente cuyo mal oculto salía a la superficie al decir un chisme o calumnia de forma espontánea.
Las buenas acciones generan energía positiva, mientras que las malas acciones generan energía negativa. Es por eso que cuando nos disponemos a reparar el daño causado por una mala acción, también tenemos que neutralizar la energía negativa que generó. El chisme y la calumnia resultan de usar el poder del habla excesivamente. Por lo tanto, la forma de rectificar el daño causado es usar el habla excesiva en forma positiva, estudiando Torá (en voz alta). Esto trae energía positiva y sagrada al mundo.
Se nos ha enseñado que las letras de la Torá son todos “nombres” de D-os, es decir, canales a través de los cuales la energía Divina entra al mundo. Así que la energía positiva que se trae al mundo a través del estudio de la Torá, contrarresta la energía negativa que produce la tzaráat, reemplazando lo destructivo, los “malos nombres” con “nombres” Divinos constructivos.
Likutei Torá 2:24c - 25a; Likutei Sijot, vol. 12, págs. 81-82.
Levítico (Vaikrá) 14:1 – 15:33
Continuando con el tema de la sección anterior, la quinta sección del libro de Levítico comienza con los rituales que debe seguir alguien afectado con tzaráat (Metzorá en Hebreo) para poder ser admitido nuevamente en el Tabernáculo. Luego describe cómo la tzaráat puede aparecer en construcciones y cómo realizar su purificación. En el final describe varias formas de impureza ritual, resultados de ciertas emisiones corporales.
SALVAR A UN AMIGO
Por Jaia Sara Silberberg
Guedalia Moshe Goldman, que después se convirtió en Gran Rebe de Zvhil y Jaim Shaul Bruk, renombrado mentor de Jabad, estuvieron cautivos en la misma época en un campamento de trabajos forzados de la prisión soviética. ¿Su ‘detestable’ crimen? Observar y difundir Judaísmo bajo el régimen comunista.
Un Shabat, el sádico comandante del campamento llamó a Guedalia Moshe a su oficina. “Tengo aquí los papeles para tu descargo”, dijo mientras ondeaba algunos papeles en el aire, “y si los firmas ahora, serás un hombre libre. “¡Pero es Shabat!” contestó Guedalia Moshe. “No puedo y no firmaré en Shabat”.
El comandante, quién por supuesto sabía de antemano que Guedalia Moshe no transgrediría el Shabat, gritó: “¡Si no firmas los papeles ahora, permanecerás aquí otros ocho años!”. “No obstante, no firmaré y no profanaré el Shabat”, respondió Guedalia Moshé.
“Muy bien”, sonrió con desprecio al comandante. “No firmes. Estarás en esta prisión durante ocho años más. Y veremos cómo tu D-os te ayuda…”.
“Si mi D-os quiere ayudarme, Él lo hará sin usted. Y si Él quiere que yo esté en esta prisión ocho años más, estaré aquí otros ocho años aun cuando usted decida permitirme marchar”, contestó serenamente Guedalia Moshe. “No tiene nada que ver con usted.”.
El comandante ya enfurecido, estaba rojo. ¡Sacó su pistola fuera del estuche, apuntó al corazón de Guedalia Moshe, y gritó: “¡Veamos quién te ayudará ahora!”. Jaló el arma…
Y en ese momento, su hija entró en la oficina. Vio a su padre apuntando con la pistola a Guedalia Moshe y dijo con voz aburrida: “Padre, es una lástima la pérdida de una bala…”
Despacio, el comandante bajó el arma. “¡No pienses que ha sido tu D-os que te salvó!” gritó a Guedalia Moshe que permanecía de pie serenamente. “¡Si no hubiera sido por mi hija, serías ahora carne muerta!”.
El comandante se volvió a un ayudante y gritó: “Traiga al otro judío escandaloso, Jaim Shaul!”.
Pasaron unos momentos, y Jaim Shaul estaba parado en la oficina al lado de Guedalia Moshe. El comandante le hizo la misma oferta que a Guedalia Moshe: “Firma estos papeles y serás hombre libre”. “Pero no puedo firmar los papeles”, contestó Jaim Shaul “Es Shabat, y yo no violo el Shabat”. “¡Entonces permanecerás aquí otros ocho años!”
“¡No escribiré en Shabat!”. De repente, Guedalia Moshe dijo: “Déme los papeles. Yo firmaré por él”. El comandante quedó enmudecido. “¡¿Qué?! Acabas de decir que no escribirías en Shabat! ¡Vas a estar aquí ocho años más por esa razón! ¿Y ahora firmarás por él?”.
“Claro que no firmaría en Shabat para ganar mi libertad”, Guedalia Moshe contestó. “Pero esto es diferente. Yo soy fuerte, y puedo resistir las condiciones en esta prisión otros ocho años. Pero Jaim Shaul es más débil, y no puede resistir este lugar. Sería peligroso para su salud permanecer aquí ocho años más. Déme los papeles y permítame firmar…”
Ambos hombres fueron liberados de la prisión a los pocos días. Y después de todo, no fue el comandante quien estaba al mando.
¿LO SABÍAS?
BÚSQUEDA Y DESTRUCCIÓN DE JAMETZ
La Noche Anterior a Pesaj
En la noche anterior a Pesaj (este año la noche del jueves 14 de Abril), una vez que la casa está limpia de jametz (leudado), se realiza el ritual de búsqueda y destrucción:
Después del anochecer, reúna a la familia, encienda una vela y diga:
Bendito eres Tu, Señor D-os nuestro, Rey del Universo, que nos ha santificado con Sus mandamientos, y nos ha ordenado lo concerniente a la eliminación del jametz.
Busque a fondo en su casa y auto cualquier jametz que pueda haber quedado luego de la limpieza (si puede pasar). Ponga la evidencia en una bolsa y guárdela para la ceremonia de quemado de la mañana siguiente.
Después de la búsqueda diga:
Toda levadura o cualquier cosa leudada que está en mi posesión, que yo no haya visto ni eliminado, y de la cual no tengo conocimiento, sea considerada nula y sin dueño como el polvo de la tierra.
Notas:
A los niños les encanta esta parte. Antes de la búsqueda envuelva cuidadosamente diez pedacitos de pan en papel y escóndalos alrededor de la casa. No olvide donde los escondió.
Además de la vela, es costumbre usar una pluma y una cuchara de madera.
¿Va a estar fuera de casa durante Pesaj? Pregúntele a su rabino cuándo y cómo hacer la búsqueda.
El Día Anterior a Pesaj
Se puede comer Jametz hasta el comienzo de la quinta hora del día (este año hasta el 15 de Abril a las 10:51). Para la sexta hora (las 11:47), todo el jametz ya debe haber sido destruido o vendido. (Estas “horas” son una doceava parte del período de luz del día.)
A partir de este momento toda la comida debe ser kosher de Pesaj.
Antes del comienzo de la sexta hora del día (11:47) haga un fuego y queme la bolsa de jametz de la noche anterior además de cualquier otro resto de jametz.
Mientras se quema el jametz, diga lo siguiente:
Toda levadura o cualquier cosa leudada que está en mi posesión, que yo haya visto o no, la haya observado o no, la haya eliminado o no, sea considerada nula y sin dueño como el polvo de la tierra.
A partir de este momento ya está libre de jametz y libre para disfrutar la experiencia liberadora del Seder y los ocho días de la Festividad de la Libertad.
MiSinaí es una publicación de Jabad Uruguay. Pereira de la luz 1130, Montevideo.
Artículos extraídos de www.Jabad.org.uy y www.Chabad.org, publicados con permiso.
Para recibir MiSinaí por email o por whatsapp, contactar por teléfono al 2628 6770 o por mail: Info@jabad.org.uy.