La amo. ¿Será por los diálogos irónicos y filosos de Sherman-Palladino, o por el maravilloso vestuario? Vi los primeros dos capítulos y quedé fascinada con la vuelta de Midge al ruedo. Después de que la dejan plantada, con muchas valijas en la pista de un aeropuerto, porque se mandó una macana: Habló en un show de que su jefe era afeminado y eran los 50. No se hablaba de homosexualidad en esa época. Después de que la despiden, vuelve furiosa a Nueva York, Ese lugar maravilloso, cuna del humor judío que esta serie denota y por un momento, nos olvidamos de la corrección política. Y escuchamos chistes misóginos de la peor calaña. Suena increíble, pero cuando escucho un chiste machista siento que entro en el túnel del tiempo y me sonrío. Los detesto, pero a la vez, me siento joven.
Hay una escena en que Shirley, la ex suegra, le hace una cita a su hijo Joel con una mujer embarazada casi por parir. Lo más divertido es este comentario: de Shirley a su hjo “No podes tener muchas pretensiones, sos un hombre divorciado con dos niños chicos y un pub en Chinatown”. Todo eso sin saber que tiene una novia china. Para una madre judía de los 50, un hijo divorciado es dramático y que tenga un club nocturno, aún más. No sabe aún lo de la novia china.
Midge se ha cansado de seguir las reglas del juego: ahora no quiere más ser telonera y ambiciona ser la protagonista de sus shows. Sin embargo, como hemos visto a lo largo de tres temporadas, abrirse paso en el mundo de la comedia no es fácil, y menos para una mujer divorciada con dos hijos y dos padres a su cargo (sí, los Weissman vuelven a vivir juntos, ahora a expensas de su hija). Los padres no pueden aceptar socialmente que van a vivir en el departamento de su hija, así que le piden a esta que es al revés.
La serie sigue siendo fiel a su esencia, con sus diálogos dinámicos y delirantes, sus situaciones surrealistas, como la de la rueda de Conie Island, las familias Maisel y Weissman mantienen una conversación a grito pelado desde sus respectivas cabinas. Leí una nota que decía que la filmación duró dos días y quedaron todos afónicos de tanto gritar.
En esta cuarta temporada también encontraremos nuevos personajes, aunque el que está generando es el interpretado por Milo Ventimiglia, (Girlmore Girls, This is US), que de momento no se ha dejado ver en los primeros dos episodios.. Aunque se espera que Ventimiglia se convierta en el nuevo interés romántico de la protagonista, los fans siguen suspirando por el rebelde Lenny Bruce (Luke Kirby), cuya ausencia se hace cada vez más insoportable, especialmente desde aquel precioso quinto episodio de la tercera temporada.
Amo esta serie porque pinta con mucho humor una época machista dónde había pocas mujeres humoristas, y las que lo hicieron como Joan Rivers, se abrieron paso en un mundo misógino, dejaron sus familias y su comodidad para encontrar su voz. También en esta serie experimento un descanso de lo políticamente correcto sea el compostaje, el no uso del nylon, el cambio climático, y lo terrible que es un ser humano que come carne.
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Los invito a ver los primeros dos capítulos de esta nueva temporada, que Amazon pondrá al aire cada viernes hasta el 11 de marzo.