Por la Prof. Rita Vinocur
¡Qué hermosa visita recibimos de CAISM (Centro de Atención Integral especializada en Salud Mental) organizada por Daniella Blengini! A ella la conocimos hace 3 años en dicha institución cuando tenía el nombre de Centro de Maroñas Medio Camino. Allí fuimos a dar una charla Sandra Veinstein y quien escribe y pude a través de todo este tiempo constatar la calidad humana de Daniella, puesto que seguimos en contacto. No es sencillo su trabajo, se necesita amor por el ser humano y profunda vocación y energía a través de lo cual se puede hacer una diferencia. Aprendí a admirarla y a quererla.
En esta ocasión Daniella incentivó la visita de los alumnos y el director Juan Andrés Corralejo junto a algunos docentes al Museo, quienes demostraron que son un equipo fuerte y sólido. Sin esas cualidades sería muy difícil seguir adelante en este Centro. Conocerlos en la visita fue un valor agregado y ojalá que se pueda repetir en otros grupos esta experiencia que fue enriquecedora para todos.

Recibimos luego reconfortantes pensamientos de 2 alumnas, con la afirmación de que su sentir era compartido por los demás participantes de la visita y siguen a continuación.
El trabajo del Museo tiene muchas aristas. Por supuesto siempre está presente el tema de la memoria para sembrar en el presente, que no se vuelva a repetir lo ocurrido en la Shoá y que haya menos discriminación y tantas ramificaciones existen en su misión. Además, como en esta visita, cuando tenemos la oportunidad de dar esperanzas de que a pesar de que haya muchas dificultades en el camino, sí se puede salir adelante y escuchar lo que dijo una chica “ esta visita me ayuda mucho parar mi tratamiento” nos incentiva, nos da fuerzas y enaltece nuestro trabajo.
Así nos escribió Daniella Blengini después de la visita compartiendo algunos testimonios de los jóvenes:
Son los testimonios de mis chicas, pero es lo que todos sentimos, infinitas gracias queridas Rita,y Sandra, por su inmensa amabilidad.
Daniella Blengini
De MAIA
Bueno, realmente ir al museo me causó varias emociones: tristeza, ansiedad, desesperación, porque me habría gustado poder ayudar en aquellos momentos tan complicados, lo cual, deja un sabor amargo en el corazón.
Y me pregunto, ¿cómo el ser humano puede ser tan cruel? Es necesario matar más
de 6 millones de personas, sólo por sus creencias? ¿Hasta qué punto hemos llegado?
Me quedé reflexionando, realmente y cómo las ganas de vivir pueden decidir entre
la vida y la muerte. Todos ellos fueron muy valientes, admirables, toda esta experiencia de vida la llevo a mi propia vida,y a mi propio tratamiento.
Muchas gracias a Rita,y Sandra por su recibimiento. Me despido con un abrazo para
ambas.
De ALEXIA
Hola me llamo Alexia.
Es para mí un privilegio tener la oportunidad de contar mi experiencia en el Museo de la Shoá, dirigido por Rita Vinocur,y Sandra Veinstein. Al llegar conocí parte de la historia de los judíos, el nazismo. Lo impactante de estos relatos, testimonios, fue escuchar a la mamá de Rita, Ana Benkel, quien relató horrores inhumanos!!! Esto me dejó la sensación de la gran indiferencia social que hubo en esa época.
Los invito a todos a visitar el museo, para descubrir los tesoros que alberga.
Abrazos! Muchas gracias nuevamente, por brindarme tanto, brindarnos a nosotros los jóvenes de Maroñas, conocerlas y conocer su historia.