Marcelo Burcatovsky, su esposa Judith y sus hijos Nicole (17) y Dan (16) se radicaron en Israel hace casi 2 años y medio, con muchas esperanzas y expectativas. Viven desde entonces en la ciudad de Raanana. Fue una decisión consciente y clara tomada en Montevideo, de apostar por un buen futuro para los hijos en el país de las grandes oportunidades, la Madre Patria del pueblo judío. Aún recuerdo que nos encontramos en el aeropuerto de Barajas cuando Marce estaba viajando a Israel, antes de la aliá, para organizar varias cosas para la familia.
Eran muchos los sueños y planes, que se van concretando gradualmente, siempre con el buen espíritu emprendedor y el encare positivo de la vida que tienen Marcelo y Judith, y que transmitieron a sus hijos.
Marcelo es Director administrativo del Departamento de programas a israel de la Unión Mundial Maccabi y Judith es Directora de Gestión de Productos en una compañía financiera. Los chicos están cursando sus estudios de Secundaria.
Lo que seguramente no estaba en los planes de la familia, es lo que vivieron esta semana por primera vez.
Así nos lo cuenta Marce, conocido por muchos de sus amigos como “Burca”.
“Nunca habían sonado las sirenas como esta vez. Hace ya unos días que se vive un ambiente de tensión en varias ciudades de Israel, lo que hacía suponer que algo así terminaríaa pasando.
La noche de ayer (por el martes) fue de mucha incertidumbre y un poco tensa. Ya desde hace unos días en ciudades y localidades del sur habían sonado las sirenas.Y a las 21:00hs empezaron a sonar las alarmas en la zona de Tel Aviv y sus alrededores, así como también en Raanana, la ciudad en la que vivimos. En ese momento corrimos al refugio y nos quedamos ahí por una hora, ya que en ese lapso de tiempo las sirenas sonaron otras 4 veces más.
Estar en el refugio por una lado te da la sensación de que estás protegido y por el otro, uno no sabe lo que está pasando a su alrededor. Sentimos ruidos de explosiones que uno realmente no puede identificar qué tan cerca o lejos son. Una de ellas la sentimos muy cerca de casa y más tarde nos enteramos que eran fragmentos del misil que había sido interceptado por la Cúpula de Hierro.
Con el corazón en la boca nos intentamos dormir, algunos en el refugio y otros cerca de él.
A eso de las 3 de la mañana dos nuevas sirenas sonaron y tuvimos que volver nuevamente al refugio. A algunos nos costó dormir, o nos despertábamos cada pocos minutos de los nervios. Son momentos difíciles de describir con palabras.
Ahora nuestra zona está tranquila, todo está tenso y la gente se está preparando para otra noche larga como la de ayer”.
Esa noche volvió, ya que también el miércoles de noche sonaron las alarmas en Raanana y la familia se tuvo que resguardar.
“Un amigo nuestro nos dijo: ´Tranquilos que la Cúpula de Hierro los protege´. Yo me pregunto que hubiese sido de Israel si no la tuviésemos.
Lamentablemente uno lee las noticias que vienen de afuera y no se puede entender tanta mala intención para desinformar acerca de lo que realmente ocurre.
Quisiéramos que el mundo sea más crítico, que si alguien quiere opinar sobre el conflicto se informe antes de hacerlo .
Lamentablemente tanto Israel como muchos palestinos están sufriendo las consecuencias de estar enfrentados debido a que la Franja de Gaza está gobernada por el grupo terrorista Hamas, y que de ese territorio también nos atacan otros como la Jihad Islámica, cuyos intereses están muy lejos de querer convivir en paz con Israel y que su pueblo prospere”.
Preguntamos a Marcelo cuál es su expectativa del mundo.
“Queremos que el mundo abra los ojos y se dé cuenta que al final las dos partes sufren por culpa de los terroristas y que hay familias y hogares destruidos.Esperamos que la situación mejore y en algún momento podamos vivir en en paz con nuestros vecinos”.