“Los aviones estaban prontos para destruir el programa de misiles”, dice fuente de seguridad.
Un día después del ataque de Hizbala con misiles anti tanques Kornet hacia territorio israelí, parecería que éste terminó sin víctimas meramente por cuestión de suerte. Uno de los misiles pegó sumamente cerca de un vehículo blindado “Zeev” en el que viajaban 5 soldados, que se salvaron por muy poco.
El vehículo viajaba por una carretera no protegida cerca de la frontera con Líbano, contradiciendo totalmente las instrucciones de los últimos días. Si bien no era en una línea de avanzada, sí aún al alcance de los Kornet. La orden, debido a la alerta que se estaba viviendo, era clara: no transitar por carreteras al alcance de los misiles de Hizbala, lo cual no fue respetado por el equipo del vehículo en cuestión, El ejército está investigando.
Los informes al respecto se publicaron en las últimas horas en los medios locales.
Fuentes militares israelíes alegaron el domingo que Hizbala había disparado hacia un vehículo vacío, pero un video publicado por la organización mostraba claramente que se apuntaba a un vehículo en marcha. Ese era el blindado en el que había 5 soldados, que podrían fácilmente haber muerto en el ataque.
Si eso hubiera ocurrido, indudablemente el hecho no habría terminado como incidente puntual sino que habría desencadenado una muy fuerte escalada. Según Amos Harel, analista militar del diario Haaretz, Hizbala disparó “al menos dos misiles” hacia un vehículo que servía de ambulancia militar. El primero no le pegó, por muy poco, el vehículo aceleró la marcha. “Los cinco soldados en su interior lograron evitar el segundo misil”, escribió.
Explicando que el “Zeev” no habría soportado el impacto del Kornet, Amos Harel escribió que “el hecho que no hubo soldados muertos o heridos, fue simplemente un asunto de suerte, no de tácticas astutas”.
Israel destacó que el incidente había terminado sin víctimas. “Ni un rasguño”, declaró satisfecho el Primer Ministro Biniamin Netanyahu. Ahora se sabe que por cuestión de metros, todo podría haber sido muy distinto.
Una fuente de seguridad dijo al Canal 12 de la televisión israelí que Israel estaba preparado ya para una represalia masiva contra el sistema de misiles precisos que Hizbala está llevando a cabo en Líbano, por órdenes de Irán. “El hecho que Nasrallah no dio en el blanco y no mató a ningún israelí”-dijo la fuente en referencia al jefe de Hizbala-“salvó a Hizbala de la destrucción de su programa de misiles precisos. Los aviones ya estaban en el aire”.
Es solo cuestión de tiempo, y al parecer muy poco, hasta el nuevo estallido. Hizbala señaló que el ataque del domingo fue una respuesta al operativo israelí del sábado 24 de agosto cerca de Damasco lanzado para desbaratar un ataque con drones explosivos iraníes a Israel, en el que murieron entre otros dos miembros de la organización.
Y luego, vino el anuncio explícito de Nasrallah, diciendo que “se acabaron las líneas rojas” en la guerra contra Israel y que desde ahora Hizbala apuntará a drones israelíes que estén volando en el espacio aéreo libanés. Aseguró que “si Israel ataca de nuevo, dispararemos no sólo a la frontera, sino tierra adentro en Israel”.