La Dra. Shaden Salameh, del Hospital Hadassah Monte Scopus
(Fotos: Capturas de pantalla de entrevista Felice Friedson, The Media Line)
La realidad en los hospitales israelíes, en los que médicos judíos y árabes atienden con total normalidad y en plena igualdad a los pacientes de distintas comunidades, también ellos judíos, árabes musulmanes, cristianos y demás, es bien conocida. Pero aún quien la ha visto de cerca, debe ser consciente de que lo que se está viviendo en el Hospital Hadassah de Jerusalem en el Monte Scopus, es historia. Por primera vez, una médica árabe está al frente de una sala de Emergencia en un hospital israelí: la Dra. Shaden Salameh.
Nacida en la alea Tur´an cerca de Nazaret, creció en una familia en la que la superación personal, los estudios, siempre fueron una meta clara.
Su padre era maestro y su madre, que interrumpió sus estudios universitarios al casarse y tener hijos a los que se dedicó, está por terminar ahora un Master como coach. Shaden es la mayor de cinco hermanos, todos ellos hoy profesionales (un hermano abogado, otro en alta tecnología, uno es técnico médico de emergencias y su hermana es farmacéutica)
“Esto es una gran responsabilidad y siento mucho orgullo”, declaró la Dra. Salameh en una entrevista a Felice Friedson, presidente y Gerente General de The Media Line en la que contó cómo maniobra entre su condición de madre de tres niños pequeños y también de médica, más aún siendo quien encabeza la Emergencia de uno de los dos hospitales Hadassah en Jerusalem.
Bromeando sobre el hecho que “las mujeres podemos hacer varias cosas a la vez, a diferencia de los hombres”, explica que maniobra con el tiempo entre su familia y el trabajo. Recuerda lo difícil que fue el comienzo del camino, cuando llegó de su aldea a estudiar Medicina en la Universidad Hebrea de Jerusalem , en el Hospital Universitario Hadassah. Si bien había estudiado hebreo en la escuela, su idioma madre es el árabe y cursar los estudios universitarios en hebreo, viviendo sola en la gran ciudad tras haber pasado toda su juventud en una aldea, no fue sencillo. “Pero cuanto más duro el desafío, más me motiva”, asegura.Y lo logró.
“Me gradué en el 2001, completé en Hadassah mi especialización como internista y desde el 2006 estoy trabajando en el departamento de Emergencia. Amo este lugar y mi especialidad”, contó en la mencionada entrevista, reiterando que toda su familia está orgullosa de la posición que ha alcanzado y del hecho que trabaja en este hospital.
Shaden es consciente de la visión que guió a la fundadora de Hadassah, Henrietta Szold, y la cita al preguntársele si se ve como ejemplo a ojos de otras jovencitas que quizás quieran estudiar medicina: “Lo que puedo decir a los jóvenes estudiantes de medicina y a jóvenes médicas mujeres, es que sueñen a lo grande, como dijo una vez Henrietta Szold. Y sigan adelante con vuestros sueños, así se convierten en realidad. Puede que haya numerosos obstáculos en el camino. No digo que es fácil. Pero es posible”.
